Tras meses de angustia, incertidumbre y temor por el impacto de conflictos mediáticos, Lizy Tagliani y su esposo, Sebastián Nebot, recibieron la resolución judicial que consolida su familia y les otorga la adopción plena del menor.
Luego de un período marcado por la exposición mediática y un conflicto judicial que generó profunda preocupación, la conductora finalmente recibió la noticia que esperaba y que marca un antes y un después en su vida personal. La humorista y su esposo lograron la adopción plena de su hijo, Tati.
La confirmación llegó en las últimas horas de la mano de Ángel de Brito, quien utilizó su cuenta de X para anunciar el desenlace favorable. El conductor de LAM escribió: «Salió la sentencia de adopción plena del hijo de Lizy y Sebastián«. La noticia fue catalogada como el mejor regalo anticipado de Navidad para la pareja.
Hasta el momento, Tagliani no se pronunció en sus redes sociales al respecto, pero la repercusión en redes sociales fue inmediata. Fueron muchos los usuarios que dejaron amorosos mensajes celebrando la noticia que hoy le da felicidad a esta familia,
El proceso de adopción de Lizy Tagliani
A lo largo de este proceso, la pareja se mantuvo firme en su deseo de preservar el bienestar del menor por encima de cualquier polémica pública. Lizy había expresado anteriormente su angustia ante la posibilidad de que una disputa con Viviana Canosa afectara el minucioso proceso de adopción. Cabe recordar que la sentencia de adopción plena llegó después de que el proceso estuviera en riesgo a causa de una denuncia presentada en tribunales por Viviana Canosa, la cual finalmente resultó ser falsa.
Con la sentencia ya confirmada, el niño, conocido como Tati, pasa a tener legalmente el apellido de su papá, Nebot. La adopción plena implica que Tati cuenta ahora con todos los derechos y garantías legales como hijo del matrimonio.
La noticia ha significado un alivio emocional para la pareja, cerrando una etapa marcada por evaluaciones e informes judiciales. Lizy y Sebastián Nebot celebran la confirmación legal de un vínculo que, según han demostrado, ya estaba cimentado desde el amor y el cuidado cotidiano, iniciando una nueva etapa marcada por la tranquilidad. Tati, quien cumplió 5 años en septiembre, pasa a ser legalmente hijo de ambos, consolidando el proyecto familiar que vienen construyendo con enorme compromiso y amor.
