El exministro de Planificación Federal Julio De Vido cumplirá este viernes 76 años en la cárcel donde cumple su condena de cuatro años de prisión por la tragedia ferroviaria de Once y luego que esta semana la justicia rechazara su pedido de prisión domiciliaria.
El exfuncionario está alojado en la colonia penal 19 de Ezeiza y el juez de ejecución Ricardo Basílico sostuvo que «las patologías que actualmente padece De Vido pueden ser adecuadamente atendidas en el establecimiento penitenciario donde se encuentra alojado».
Allegados a De Vido adelantaron a Clarín que apelarán esa decisión para que sea revisada por la Cámara Federal de Casación Penal. Los abogados del exfuncionario, Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, trabajan en ese presentación para la que tienen un plazo de 10 días hábiles.
Julio De Vido en Comodoro Py cuando quedó detenido. Foto: Federico Lopez ClaroAsí, De Vido no podrá evitar pasar este viernes su cumpleaños 76 en la cárcel. No es la primera vez. El ex ministro estuvo preso desde octubre de 2017 -cuando le quitaron los fueros como diputado nacional- a diciembre de 2019 en la cárcel federal de Marcos Paz. Luego recibió la domiciliaria y en marzo de 2020 fue excarcelado.
El 13 de noviembre pasado se presentó en lo tribunales de Comodoro Py para quedar detenido luego que la Corte Suprema de Justicia de la Nación confirmó su condena por la tragedia de Once, ocurrida el 12 de febrero de 2012 cuando un tren de la línea Sarmiento chocó en la estación de Once y mató a 51 personas.
«Situación de especial vulnerabilidad»
La defensa de De Vido pidió su prisión domiciliaria por su edad -a partir de los 70 años la ley permite su otorgamiento, aunque no es automático- y por su estado de salud con una «situación de especial vulnerabilidad». El exfuncionario es diabético y requiere insulina todos los días.
Familiares de víctimas de la tragedia de Once. El exfuncionario pidió cumplir la prisión domiciliaria en su chacra de la localidad bonaerense de Zárate. El Cuerpo Médico Forense lo examinó y concluyó que «se encuentra compensado en su estado de salud física» y que podía quedar alojado en la cárcel si se cumplían una serie de requisitos para atender su salud.
Los peritos de parte de De Vido coincidieron con ese informe pero consideraron como de «cumplimiento imposible» cuidar la salud del exfuncionario en prisión porque no cuenta con médicos especialistas en diversas áreas y existen limitaciones para traslados fuera de la prisión en casos de urgencias.
La cárcel de Ezeiza. FOTO: ENRIQUE GARCIA MEDINA«Ha transcurrido un lapso superior a un mes sin que se haya verificado episodio alguno en el estado de salud del causante que tornara necesaria su derivación al Hospital Penitenciario Central o a un establecimiento asistencial extramuros, circunstancia que permite inferir que, en su actual ámbito de alojamiento, se le brindan las prestaciones terapéuticas adecuadas para sostener la estabilidad de su cuadro clínico», sostuvo el juez Basílico en su resolución -en la que citó todos los informes médicos- para rechazar el pedido de domiciliaria.
«De igual modo, no surge de los profusos informes aunados en autos que los recursos médicos y materiales disponibles en la Unidad N. 19 resulten inadecuados o insuficientes para el correcto tratamiento y seguimiento de las afecciones crónicas que afectan al interno De Vido, contando incluso el complejo con personal médico las 24 horas; por lo que no se avizora que una eventual permanencia en su domicilio particular asegure una atención profesional de mayor calidad que redunde en una mejora de su condición de salud», especificó el juez.
Tras el fallo, y con su postura, la defensa de De Vido volverá a pedir la detención domiciliaria.
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