21.8 C
Buenos Aires
miércoles, febrero 5, 2025

Hecha en la Patagonia: Salvaje Sur, buenas historias en papel para disfrutar de la lectura

Más Noticias

Por Mauro Moschini

Todas las generaciones literarias tienen que ocuparse del problema de ganarse un público. Actualmente, puede parecer que en el pasado no fue tan difícil. Pero el público nunca está ahí como algo dado y no va a prestar atención a quien sea que busque hablarle. Llegar a interpelarlo es gran parte un problema comercial.

Algún escritor ya relativamente viejo se quejaba hace un tiempo de que la editorial prácticamente le pedía que se transformara en un influencer. Pero otros más jóvenes y con conocimiento de marketing digital no parecen tener problemas con hacer lo que las redes sociales requieren para construir una comunidad de potenciales lectores. Aunque sea un recurso tan válido como cualquier otro, ciertamente el marketing digital no es la única posibilidad.

Salvaje Sur, la revista de narrativa creada y liderada por Matías Castro Sahilices, es –entre muchas otras cosas– una feliz demostración de que actualmente se puede llegar a un público fiel y numeroso con una propuesta centrada en el placer por la lectura en papel.

Matías Castro Sahilices, creador de la revista Salvaje Sur.

Al ver un número de Salvaje Sur salta a la vista, por la calidad del diseño, la impresión y las ilustraciones, que se trata de un producto muy bien pensado, y así fue reconocido por el Fondo Nacional de las Artes, que en 2023 le dio una mención especial en el Concurso de diseño aplicado a temáticas de Arte y Cultura.

Salvaje Sur, las claves del proyecto

Su gancho es la nostalgia por la literatura pulp que hace algunas décadas iba por los mismos circuitos o publicaciones que los cómics (cuando éstos no eran objetos “de culto”, sino la literatura preferida por millones de personas escolarizadas que no tenían una pantalla en las manos todo el tiempo).
Pero el secreto de su permanencia –está por publicar el décimo número en cuatro años– probablemente sea que está hecha con amor y con entusiasmo por un grupo de personas que disfrutan genuinamente de este tipo de lecturas y que la producen para personas como ellas.

“Si hubiera adivinado que había una necesidad de alguien con una mentalidad combinada de autor, editor y diseñador, y que eso iba a funcionar, lo hubiera empezado mucho antes”, cuenta Castro Sahilices.
“Así empecé la revista: sabía dónde estaba el faro estético porque había algo que no estaba encontrando. Lo otro que necesitaba –continúa– era el acompañamiento gráfico de los ilustradores. El primer número lo hice con algunas ilustraciones mías y otras de dominio público. A partir del número 2 se sumaron Diego Fiorucci (de Rosario), Javier Mattano (de Ciudad Evita), Manuel Pérez (de Capital) y Omar Hirsig (de Ushuaia). Ellos están incluso en los números que no ilustran. Sin ellos no hubiera funcionado”.

Portada de primer número de Salvaje Sur. En breve editarán el décimo.

Otra clave de este éxito quizás radique en que –aunque vive en San Martín de los Andes hace una década y media– Matías Castro Sahilices es oriundo de Rosario, ciudad que, según este editor “creció dándole la espalda a Buenos Aires a propósito. El rosarino siente que no le dan pelota. Entonces le da la espalda a Buenos Aires y construye desde ahí”.

Sin embargo, definirlo como rosarino sería soslayar una parte decisiva de su biografía: “Cuando me di cuenta de cómo quería vivir dejé Comunicación Social, me puse a estudiar Turismo y me puse a viajar. Primero, fui a Calafate porque quería ser guardaparque”.
Después pasó por Bariloche, Ushuaia, Yavi… hasta que se fue a Barcelona. “Trabajaba de cosas que me permitieran conocer gente, medio aventurero, a lo Bolaño. Tenía la cabeza siempre en la literatura, aunque no lo mostraba mucho. Yo estaba robando historias. La verdad es esa. Un año en Barcelona –sigue contando Sahilices– me puse a buscar trabajo y conseguí tres entrevistas: para trabajar en un hotel boutique, en un hotel cinco estrellas y en un hostal de mala muerte en el barrio gótico. Y elegí ese último. Trabajaba a la noche ahí hasta que no soporté más porque me estaba afectando emocionalmente. La idea era siempre estar con el oído atento escuchando esas cosas que ya eran literatura, pero en algún momento iban a terminar siendo mi literatura. Ese fue parte de mi aprendizaje de autor vivencial, que es lo que a mí me interesa, cuando yo corto con el laburo editorial voy a buscar autores como Jack London, Hemingway, Néstor Sánchez, Carlos Correas, Francisco Coloane, Manuel Rojas…”.

Publicar: un hecho social

Castro Sahilices escribió una novela titulada Barcelogasona, que decidió dejar inédita. “Tuvo una serie de eventos desafortunados y nunca la pude editar. Estuvo a punto de salir, pero siempre pasa algo. Entonces decidí no sacarla. Habla de esa Rosario que viví yo cuando era joven, que era una maravilla”.

Pese a la buena experiencia con Salvaje Sur, en este momento no le ve el sentido a publicar un libro suyo. “Cuando estás tras bambalinas –explica– un montón de cosas empiezan a perder el sentido. Me pasa todo el tiempo que le mando textos que escribí a diferentes personas y no les prestan atención. Trabajando como diseñador editorial de otros proyectos termino leyendo mucha obra. Y me pregunto si hace falta publicar todo lo que tenemos escrito…”.

Lo mejor de esta revista es que hice amigos. Hay un grupo de buena gente que comparte las ganas de leer a otra gente y de leer este tipo de historias (…) A partir de ahora, solo voy a hacer proyectos con buena gente».

Matías Caastro Sahilices

Aunque puedan sonar pesimistas, estas afirmaciones acaso den cuenta de que para Castro Sahilices publicar un texto es una actividad social, cuyo sentido radica en llegar a un público, no en satisfacer un capricho individual. Son más de cien los autores que han publicado en Salvaje Sur. Algunos son más conocidos, otros más jóvenes, todos de muy diversos lugares del país. Improbables investigadores de la literatura “de provincias” o “federal” encontrarán en esta revista una buena fuente para elaborar un estado de la cuestión. Podemos anotar que entre los textos más destacados están los escritos por su propio editor (que no incluye textos suyos en todos los números).

En el número 2, dedicado al género western, está uno de los mejores, titulado “El mejor legado”. Los primeros párrafos del cuento no revelan el género del personaje que lo protagoniza, pero quien lo lee (aunque quizás no haya pensado en eso) encuentra un indicio de ese dato en el tercer párrafo, y está puesto de una manera tan elegante que provoca ese escozor que todo buen texto quiere brindar.

Otro muy bueno es “La chinita”, en el número 4. Está dedicado a Fray Mocho, el escritor costumbrista que en 1898 publicó la novela En el Mar Austral, ambientada –como el cuento de Castro Sahilices, y por eso la dedicatoria– en la Tierra del Fuego de aquella época, en la que una de las principales actividades económicas era el rescate de naufragios.

Aunque Fray Mocho le puso a su novela el subtítulo de “Croquis fueguinos”, todos sabían que él nunca había estado en el paisaje que recreó. Castro Sahilices sí pasó una temporada en Ushuaia, por lo que su dedicatoria tiene que entenderse también como un homenaje a la pura imaginación como guía de la literatura.

P: Como contabas antes, en Salvaje Sur pudiste poner en juego tus capacidades como escritor, diseñador y editor…
R:
Cada número tiene un ritmo propio y como editor voy ordenando los textos a medida que entiendo cuándo baja y cuándo sube. La idea es que haya un movimiento que te vaya llevando hasta el último cuento. Cuando voy a incluir un texto de mi autoría, espero a tener decididos todos los demás para escribir el mío. En el anteúltimo número, de Espada y Brujería, escribí cuatro cuentos diferentes hasta que entendí cuál era el que iba. Me costó mucho. Me tuve que reconectar con el género. Es fantasía heroica en el estilo de Robert E. Howard, el de Conan el Bárbaro. Un género que me venían pidiendo, que a mí me gusta pero que dejé de leer cuando era adolescente.

P: Por los lugares donde viven quienes publicaron sus textos en la revista, se nota que tiene un alcance que excede a una región o ciudad en particular.
R:
Cada vez que empecé un proyecto editorial, lo primero que hice fue pensar cómo podía funcionar en cualquier lugar de habla hispana, sin importar en dónde estaba yo en ese momento. A partir del segundo número de Salvaje Sur, yo tenía bien claro que era importante que esos textos que yo estaba poniendo todos juntos con un marco de tanto laburo, tenían que salir de más allá del Collón Cura. Y empecé a ponerle el pecho porque entendía que tenía una responsabilidad con todos los autores. La gente merece que Federico Rodríguez de Tierra del Fuego sea leído en otra provincia. O Marcelo Gobbo, Ceci Fresco, Diego Rodríguez Reis, los que vos quieras. Teniendo eso claro, entendí que tenía que traer gente nueva y esa gente es de Córdoba, del litoral…

P: ¿Cómo llegan los textos a la revista?
R:
A partir del número 2 dejé de hacer una convocatoria abierta. Empecé a recibir recomendaciones de amigos, de gente que decía “che, tal persona vio tu revista y le gustaría participar”. Como el que recomendaba ya había participado de la revista o la conocía, sabía bien cómo explicar a dónde iba el proyecto. Eso fue armando una comunidad de narradores y narradoras que están completamente locos y que les encanta este proyecto. Entonces puedo elegir y avisarles la temática del número siguiente.

P: ¿Qué te parece lo mejor de este proyecto?
R:
Lo mejor de esta revista es que hice amigos. Hay un grupo de buena gente que comparte las ganas de leer a otra gente y de leer este tipo de historias. Somos narradores, editores e ilustradores que se dan una mano. Es lo más importante. Creo que es algo que va a ir más allá de que salga Salvaje Sur o no. Yo me venía quemando con proyectos colectivos donde la gente que tenía al lado tenía talento, pero eran personas muy complicadas… A partir de ahora, solo voy a hacer proyectos con buena gente.

Redacción

Fuente: Leer artículo original

Desde Vive multimedio digital de comunicación y webs de ciudades claves de Argentina y el mundo; difundimos y potenciamos autores y otros medios indistintos de comunicación. Asimismo generamos nuestras propias creaciones e investigaciones periodísticas para el servicio de los lectores.

Sugerimos leer la fuente y ampliar con el link de arriba para acceder al origen de la nota.

 

- Advertisement -spot_img

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Advertisement -spot_img

Te Puede Interesar...

Murieron dos de los heridos por la explosión de un gasoducto en Córdoba

Dos de las personas heridas como consecuencia de la explosión de un gasoducto en Villa María, Provincia de Córdoba,...
- Advertisement -spot_img

Más artículos como éste...

- Advertisement -spot_img