El expresidente declaró en la causa por violencia de género y apuntó contra la justicia y su expareja.
Alberto Fernández presentó un extenso descargo en su indagatoria por violencia de género contra Fabiola Yáñez, asegurando que “jamás ejercí violencia física” y que, por el contrario, él fue el agredido en la relación. En su escrito de 222 páginas, Fernández negó las acusaciones, cuestionó la filtración de pruebas a la prensa y señaló problemas de alcoholismo en su expareja.
El exmandatario se negó a responder preguntas del juez Julián Ercolini y del fiscal Ramiro González, a quienes recusó por presunta parcialidad. Ahora, la justicia deberá definir si lo procesa, dicta falta de mérito o lo sobresee.
Fernández también criticó la investigación y denunció que su derecho a defensa fue limitado. Mientras tanto, el caso sigue generando repercusiones en el ámbito político y judicial.