El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha sido protagonista en las últimas horas al poner sobre la mesa la legalización de la cocaína en el mundo. En el Consejo de Ministros emitido en directo esta semana, el controvertido máximo mandatario colombiano ha asegurado que esa substancia “no es más mala que el whisky” y que solo es ilegal “porque se fabrica en América Latina”.
Petro argumentó que la ilegalidad de la cocaína se debe a su lugar de producción y no a sus efectos: “La cocaína es ilegal porque se fabrica en América Latina, no porque sea peor que el whisky”. Una afirmación que se atreve a hacer, asegura, porque “los científicos lo han analizado”.
Petro señala a Estados Unidos: “Es el fentanilo que está matando a sus ciudadanos”
Petro también sugirió que el tráfico mundial de cocaína podría ser “fácilmente desmantelado” si esta droga se legalizara en todo el mundo. “Se vendería como los vinos”, argumentó. Además, señaló que son los opioides sintéticos como el fentanilo “los que están matando” a los estadounidenses, enfatizando que “eso no se fabrica en Colombia”.
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Francesc Peirón
![Imagen de archivo del presidente de Colombia, Gustavo Petro](https://www.lavanguardia.com/files/image_104_108/files/fp/uploads/2024/12/12/675aa2be96a02.r_d.1924-1240.jpeg)
Según datos de la oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (UNODC), Colombia cultivó 253.000 hectáreas de hoja de coca (una cifra récord) en el 2023 y es el mayor exportador de cocaína del mundo, con una producción de 2.600 toneladas, mientras que Estados Unidos es el principal consumidor.
El país sudamericano ha tenido una larga y compleja historia con la cocaína, que ha influido significativamente en el país durante décadas. El auge del narcotráfico en la década de los ochenta tuvo un impacto en la sociedad y la política aún latente.