Mediante un comunicado divulgado en redes sociales, el grupo integrado por chapines en aquella nación y sus familiares en esta tierra descartó que la mayoría de ellos sean criminales.
“Las y los inmigrantes son personas trabajadoras que llevan a sus hijas e hijos a la escuela y que cumplen con las normas de respeto en los lugares en los que habitan”, subrayó.
A propósito de la visita a este país del secretario norteamericano de Estado, Marco Rubio, recordó que la migración se generó debido a la falta de acceso a trabajo, vivienda, educación y también a una alimentación nutritiva.
Al menos 1,5 millones de guatemaltecos viven en Estados Unidos de forma irregular y en su mayoría son personas provenientes de comunidades indígenas y rurales, describió.
Muchos no tienen, aunque aspiren a ello, documentos legales para laborar, situación que vulnera sus derechos humanos y libertades fundamentales, amplió.
“Guatemala no está lista para recibir a miles de retornados dado que los índices de desempleo son altos”, expuso en el texto.
El 70 por ciento del mercado laboral lo abarca la economía informal, la cual mantiene a los locales en pobreza y pobreza extrema, remarcó.
Las deportaciones no van a detener la migración, afirmó el colectivo, mientras apuntó que el esfuerzo por salir del país colocará a muchas familias en situación de endeudamiento.
De hecho, añadió, perderán lo poco que tienen; asimismo, se expondrán al crimen organizado (ejemplo la trata de personas), así como a la violencia común.
Ante la situación migratoria actual en Estados Unidos, propuso la creación de un programa de contención enfocado a disminuir la migración irregular.
El colectivo de migrantes Guatemala Distrito 25 planteó que para lograr ese propósito es necesario apoyar a Guatemala en la lucha contra la corrupción.
Datos del Ministerio de Relaciones Exteriores dan cuenta que en Estados Unidos radican alrededor de tres millones de connacionales.
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