Especialistas del CONICET en el Instituto de Inmunología Clínica y Experimental de Rosario (IDICER, CONICET-UNR) y el Laboratorio de Tecnología Inmunológica de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) trabajan en el diseño de un prototipo vacunal de administración nasal para prevenir la enfermedad de Chagas.
Hasta el momento, la investigación arrojó, en ensayos preclínicos realizados en modelos animales, resultados positivos en la disminución de la miocarditis, la inflamación y las alteraciones electrocardiográficas provocadas por la enfermedad en la fase crónica, algo poco explorado, ya que la mayor parte de los estudios de eficacia en vacunas se centran en la fase aguda de la patología.
Actualmente existen dos medicamentos para combatir al parásito, el benznidazol y el nifurtimox. Ambos fueron desarrollados unos setenta años atrás y hasta el día de hoy no se ha podido descubrir ni sintetizar un fármaco que los suplante o supere en eficacia.
“El inconveniente con el tratamiento de la enfermedad de Chagas es que estos medicamentos son muy efectivos en la fase aguda, es decir, en los primeros meses de la infección. Pero esta fase generalmente pasa desapercibida y se pierde esta oportunidad terapéutica. Es por esto que la mayor parte de los individuos que se infectaron no recibieron el tratamiento adecuado”, explica Ana Rosa Pérez, directora del IDICER.
En ese sentido, destacó que la vacuna que están desarrollando es preventiva y que lo más innovador es que la administramos por vía nasal. “Esto posiblemente la haga más aceptable por la población, en el sentido de que sería más fácil de inocular”, concluye Pérez.