Los incendios forestales continúan arrasando la Patagonia, donde el fuego ya consumió más de 25.000 hectáreas en Chubut, Río Negro y Neuquén.
La situación es crítica en varias localidades, donde brigadistas, bomberos y voluntarios trabajan a contrarreloj para contener las llamas, mientras las condiciones climáticas complican el operativo.
Uno de los focos más preocupantes se encuentra en el Parque Nacional Nahuel Huapi, donde el fuego ya destruyó más de 10.000 hectáreas y la densidad del humo obligó a suspender los vuelos de aviones hidrantes.
En Neuquén, el incendio en el Parque Nacional Lanín sigue activo, con más de 5.000 hectáreas devastadas, y en Chubut la situación también es alarmante, con incendios que ya destruyeron viviendas y obligaron a evacuaciones.
Las condiciones meteorológicas han generado que el humo de estos incendios llegue hasta la zona Sur de Mendoza, afectando la visibilidad en San Rafael y General Alvear.
En la región se ha percibido un cielo con tonalidades rojizas, especialmente en el horizonte, y una densa capa de humo en suspensión.
El fenómeno se intensifica en zonas abiertas y se mantiene mientras persistan los vientos provenientes del sur.
En algunos sectores, la reducción de visibilidad es notable, al punto de que ciertos paisajes característicos, como los cerros de Valle Grande, quedan ocultos tras una neblina densa de humo.