Barcelona
“Lo que tenemos que hacer es cambiar las reglas del juego”. Esta fue una de las frases que repitió el alcalde Jaume Collboni tras el anuncio de la compra de la casa Orsola del Eixample. Hoy lo ha vuelto a decir. Además de suprimir las licencias de pisos turísticos en 2028 y regular los precios de los arrendamientos en zonas tensionadas como en el caso de Barcelona, Collboni también quiere introducir un límite a los alquileres de temporada.
“Es evidente que hay un punto negro que son los alquileres de temporada. En estos momentos, gran parte de la oferta de alquiler se va al de temporada porque saltan el tope de la regulación”, ha asegurado el alcalde durante una entrevista en Els matins de TV3. Actualmente, en el Congreso de los Diputados hay en trámite una modificación de la ley de arrendamientos urbanos que propone “equiparar los alquileres de temporada a los habituales en cuanto a la regulación”, ha recordado.
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En cuanto a la norma que obliga a los promotores a destinar el 30% de los pisos para construir vivienda protegida, ha detallado que hay una propuesta para modificarla que los grupos han de debatir. El alcalde ha reconocido que la medida, aprobada por amplía mayoría en el 2018 con los votos BComú, CiU, PSC, ERC y CUP, aunque es “imprescindible” no ha funcionado por lo que apuesta por revisarla y modificarla.
Collboni ha sostenido que la norma está “frenando” la construcción de vivienda privada y ha detallado que solo se han producido 26 viviendas sociales de las 2.000 previstas. En la línea de la especialista en vivienda en Catalunya Carme Trilla, la presidenta de la Fundació Hàbitat3 – entidad que adquirió la casa Orsola con el Ayuntamiento- y del Observatori Metropolità de l’Habitatge de Barcelona, la fórmula del alcalde es que el 30% de vivienda protegida no solo se aplique en el mismo edificio sino que se puedan construir los pisos sociales en otro lugar dentro del mismo barrio.
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La modificación de esta norma desató un agrio desacuerdo entre PSC y BComú, que impidió la aprobación de los nuevos presupuestos para este año del Consistorio. Collboni es consciente de que está en minoría para sacar adelante la modificación y si fuera por él la implantaría lo “más pronto posible”, pero ha señalado que ahora toca esperar el “proceso de análisis, reflexión y posicionamiento” de los grupos municipales.
El traslado de la clarisas de Pedralbes
Durante la entrevista también se le ha preguntado sobre las tres últimas monjas clarisas del monasterio de Pedrables, que se trasladarán al cenobio de Vilobí d’Onyar el próximo 15 de febrero. Collboni ha dicho que la decisión “no depende de mi ámbito competencial” y ha asegurado que el funcionamiento del monasterio como museo está “garantizado” así como el “fondo cultural”.
También propondrá a las monjas que sigan acudiendo para Santa Eulàlia al cenobio de Pedralbes. “Mi deseo como alcalde es que continúen y si no pueden porque las reglas de la orden y de la propia iglesia dicen que ahora no porque quedan tres, que encontremos las suficientes para que vuelva la orden”.
