Todo un año, completo, para el pliego sea una gigantesca película de reparos, rechazos, avales, acompañamientos, internas y poder. Debe anotarse que el 12 de febrero de 2025 el Honorable Senado de la Nación alcanzó dictamen para que la Cámara Alta apruebe al Dr. Ariel Lijo como nuevo miembro de la Corte Suprema de Justicia, el hombre elegido por Javier Milei.
Resulta MUY significativo que un tema tan controversial como vidrioso se haya convertido en un MODELO de consenso, acuerdo anti extremos o grieta.
Basta con mirar el dictamen que habilita el tratamiento donde los dialoguistas reafirman su fe en las fuerzas del cielo, y otros confirman que cuando se trata de PODER los psuedos principios toman su debido rostro.
Rubricaron el proyecto el jefe del oficialismo en el Senado, Ezequiel Atauche (Jujuy); los correntinos de Provincias Unidas y de la UCR, Carlos Espínola y Eduardo Vischi; la tucumana aliada al PRO Beatriz Ávila; el peronista disidente Juan Carlos Romero (Provincias Unidas); los integrantes del kirchnerismo Sergio Uñac (San Juan), Lucía Corpacci (Catamarca) y Claudia Ledesma Abdala de Zamora (Santiago del Estero); y el misionero renovador -no massista- Carlos Arce.
Dato sobresaliente es el de Lucía Corpacci, senadora por Catamarca y Vicepresidenta Segunda del PJ que conduce CFK, quien ofreció como argumento político lo que confirma la la crisis de representación que domina el país: «La verdad es que la Justicia está llena de cuestionamientos y gente que llegó que parecía intachable después demostró… la verdad… es tan difícil el tema de la Justicia”. Y añadió: “Hasta podría decirle que algún otro que manden me podría resultar mucho más preocupante».
La doctrina del menos malo siempre tiene sus efectos y defectos. Vale reproducir las razones de rechazo esgrimida por el Colegio de Abogados de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires:
La Corte Suprema de Justicia de la Nación es el máximo tribunal federal de nuestro país y, en tanto tal, posee la última palabra en los juicios en los que se discuten cuestiones que involucran los derechos y garantías asegurados en la Constitución Nacional. También dirime con carácter definitivo los conflictos entre las Provincias y entre éstas y la Nación. Su misión constitucional y su posición institucional es de tal gravedad que sus decisiones se encuentran en relación directa con la honestidad e idoneidad de sus integrantes, como recuerda la Corte Suprema en el Prólogo al volumen 1 de su colección de Fallos. Esos magistrados deben ser juristas intachables, con distinguidos antecedentes profesionales y morales. Pues la falta de idoneidad o la ausencia de honorabilidad de alguno de ellos, tarde o temprano pero inexorablemente, deshonrará al Tribunal ante la opinión pública.
Actualmente existen -sin dudas- candidatas de destacada trayectoria que estarían llamadas a ocupar prioritariamente el sitial que ocupara la Dra. Highton de Nolasco. Obviamente, la nominación del Juez Ariel Lijo, recae sobre alguien que no integra aquella clase. Sin perjuicio de ello, los antecedentes del Dr. Lijo no satisfacen los requisitos de idoneidad y aptitud requeridos para ese cargo.
Como hemos adelantado más arriba, el o la postulante propuesta para integrar la Corte Suprema debe ser alguien de intachable carrera profesional, de desempeño excepcional, sin cuestionamientos económicos ni involucramientos políticos. Sin embargo, el Dr. Lijo, juez a cargo del Juzgado Criminal y Correccional Federal nro. 4 de Comodoro Py 2002, ha sido reiteradamente cuestionado por mal desempeño ante el Consejo de la Magistratura de la Nación por su actuación irregular o morosa en causas de corrupción contra la Administración Pública Nacional. En particular, este Colegio lo denunció ante el Consejo por la demora en la tramitación de numerosas causas y por la falta de colaboración en la reunión de datos estadísticos que permitieran controlar el desempeño del tribunal a su cargo. Idéntico reproche se le ha formulado en la causa en la que se debería investigar el asesinato del sindicalista José Ignacio Rucci. Los medios periodísticos también se han hecho eco de esas y otras imputaciones contra el magistrado que, consideradas en conjunto, ponen en evidencia que el Dr. Lijo está muy lejos de poseer las cualidades de excelencia que se espera de un juez de la Corte Suprema.
Por ello, el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires considera inaceptable y se opone a la candidatura propuesta por el Poder Ejecutivo del juez Lijo, en reemplazo de la vacante producida en la Corte Suprema de Justicia de la Nación por la Dra. Highton de Nolasco.
Lijo está entre los jueces con mayor cantidad de denuncias ante el Consejo de la Magistratura: un promedio de 1,6 denuncias disciplinarias por año desde que se desempeña como juez, es decir, 32 denuncias en total. De las 89 causas de corrupción que estuvieron a su cargo, únicamente elevó a juicio 14, siendo el cuarto juez que menos casos elevó, según un informe hechó por la la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ). En 2018, la fundadora de la Coalición Cívica, Elisa Carrió lo denunció penalmente por asociación ilícita, lavado de dinero, coimas y tráfico de influencias.
El signo y símbolo de Lijo Cortesano ¿actualiza los pactos de impunidad que requiere el poder político? El dictamen favorable, ¿llevará a que existan cambios en el proyecto de Ficha Limpia?