El oficialismo logró ayer desactivar los proyectos de bloques opositores para retrotraer o bien reducir las subas en los diferentes impuestos aplicados para 2025 por la administración de Martín Llaryora.
No le resultó sencillo a los legisladores de Hacemos por Córdoba. Es que, a priori, no tienen mayoría en el recinto por lo que necesitaban aliados para poder abortar el intento opositor.
En el PJ aseguraron que el arco opositor buscó “hacer politiquería”, mientras que desde Juntos por el Cambio dijeron que “el peronismo le tiene miedo a debatir”.
En el temario de la sesión de ayer se pusieron en juego dos proyectos que apuntaban a incorporar cambios a la cuestión tributaria.
Una propuesta del radical Oscar Saliba que apuntaba a los gravámenes sobre los servicios agropecuarios; y una segunda iniciativa más amplia del liberal Gregorio Hernández Maqueda con la eliminación del impuesto de Sellos, la reducción de 50% de las alícuotas del Impuesto sobre Ingresos Brutos y la quita de la doble imposición mediante nuevas exenciones al Impuesto Inmobiliario y del Impuesto de la Propiedad Automotor.
Finalmente, el PJ se impuso con los 33 votos propios y el apoyo de los tres legisladores del PRO, la radical disidente Bisotto, Spaccesi (Libertad Avanza) y Bruno. Terminada la sesión hubo varios cruces porque el PJ aseguró en los pasillos que había dos exintendentes que habían votado con el oficialismo. A lo que el bloque de la UCR le respondió que votó unida, aunque en el debate aportaría cambios a la propuesta inicial de Hernández Maqueda.
Por lo demás, caídos los proyectos, el liberal Rodrigo Agrelo presentó un amparo judicial en representación de una contribuyente que se sintió damnificada por el alza del Inmobiliario Rural.