
Vilanova i la Geltrú
Una jueza de Vilanova i la Geltrú ha dado diez días hábiles al exmarido de Rosa Peral, del que se separó con anterioridad al asesinato por el que fue condenada a 25 años de cárcel, para que decida si reclama a Netflix en nombre de la hija mayor, de las dos que tuvieron, ya que solo él ostenta la patria potestad.
Prácticamente ocho años después de que la que fuera agente de la Guardia Urbana de Barcelona fuera detenida acusada, junto al policía Albert López, del asesinato del también guardia urbano Pedro Rodríguez, el nombre de Rosa Peral no deja de ocupar titulares y esta vez salpican al que fuera su marido y padre de sus dos hijas, menores de edad.
Ayer debía celebrarse en el juzgado de primera instancia numero 1 de Vilanova i la Geltrú la vista previa por la demanda contra Netflix y la productora Arcadia por la serie El cuerpo en llamas , interpretada por la actriz Úrsula Corberó.
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Peral, representada por la letrada Núria González, considera que se vulneraron los derechos al honor, a la propia imagen y a la intimidad tanto de ella como de su hija, y les pide alrededor de 30 millones de euros, por los dos procesos en paralelo, el de ella y el de su hija.
Al arrancar la vista, la fiscal advirtió a la jueza de que Peral carece de legitimidad legal para representar a la menor, pese a ser su madre, y propuso dar la oportunidad al padre de posicionarse. La jueza dio por buena la propuesta y aplazó la vista hasta saber si el hombre quiere reclamar contra Netflix y la productora o dejar el caso en manos de la Fiscalía y que sea el ministerio público el que defienda los intereses de la menor si entiende que fueron vulnerados.
Peral cumple una condena de 25 años de prisión por un delito de asesinato con alevosía
La Audiencia de Barcelona condenó en 2020 a 25 y 20 años de prisión por un delito de asesinato con alevosía a Rosa Peral y a Albert López, respectivamente, penas que posteriormente confirmaron el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya y el Supremo.
Anoche el padre de las niñas, agente de los Mossos d’Esquadra, no había recibido la notificación de los juzgados y se había enterado del asunto por varios periodistas. El hombre dispone de diez días para tomar una decisión “difícil” que, aseguraron fuentes de su entorno, tendrá en cuenta exclusivamente el “velar” por la integridad de la menor y de su hermana.