El uso excesivo de pantallas está causando problemas posturales en los niños, como la joroba y dolores musculares. Este daño invisible afecta su salud física y emocional. En tal sentido, hacen un llamado urgente a los padres para tomar medidas y evitar que la tecnología perjudique su desarrollo.
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15 de marzo de 2025 15:40
En un mundo cada vez más digitalizado, el uso excesivo de dispositivos electrónicos como teléfonos móviles, tablets y videojuegos genera preocupación entre los profesionales de la salud.
El Dr. Robert Núñez, pediatra, alertó sobre el incremento de trastornos posturales en niños y niñas, destacando que, problemas como la joroba están surgiendo debido al uso desmedido de estos dispositivos.
Esta advertencia subraya los peligros que los niños enfrentan no solo en su desarrollo físico, sino también en su bienestar emocional.
Consecuencias de la exposición prolongada a las pantallas
En ese contexto, explicó que el uso excesivo de dispositivos electrónicos afecta directamente la postura de los niños, quienes suelen adoptar una postura perjudicial: la cabeza inclinada hacia adelante, la espalda encorvada y los ojos fijos en la pantalla.
Indicó que esta postura, mantenida durante períodos prolongados, está provocando efectos negativos en la salud de los más pequeños.
A continuación, las principales consecuencias, según Núñez:
-Joroba o cifosis postural: la inclinación constante de la cabeza hacia adelante, tan común cuando los niños usan dispositivos electrónicos, provoca una sobrecarga en la columna cervical.
Según estudios publicados en The Journal of Physical Therapy Science la sobrecarga prolongada de esta zona de la columna puede generar dolor crónico, contracturas musculares e incluso deformaciones a largo plazo.
La curvatura anormal que genera esta sobrecarga se conoce como cifosis postural, o “joroba”: la intensidad de esta afección depende de la cantidad de tiempo que se pase en una mala postura.
-Estrés en la columna y tendinitis postural: La postura incorrecta no solo afecta a la columna, sino también a los músculos. La presión constante sobre la zona cervical puede desencadenar dolor en los músculos del cuello, hombros y espalda, lo que a su vez genera dolores de cabeza, mareos y rigidez muscular.
De acuerdo con un artículo en Pediatrics International, el uso excesivo de pantallas en una mala postura es uno de los factores principales que contribuyen a este tipo de trastornos musculoesqueléticos.
-Miopía y problemas de visión: La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha señalado que el uso excesivo de pantallas durante la infancia está relacionado con el aumento de la prevalencia de la miopía.
Según un artículo de JAMA Ophthalmology la proximidad constante de los dispositivos a los ojos contribuye al empeoramiento de la visión, especialmente en niños que pasan más de dos horas al día frente a las pantallas.
Además, el uso de dispositivos a una distancia menor a 40 cm de los ojos aumenta el riesgo de desarrollar esta condición.
-Dedo en gatillo: Este problema es más común de lo que parece, especialmente debido al uso de teléfonos móviles y tablets. El movimiento repetitivo del pulgar al escribir o jugar en dispositivos puede inflamar los tendones y generar una condición conocida como “dedo en gatillo”.
Según un estudio publicado en The Lancet, el uso excesivo de las manos en dispositivos táctiles está provocando inflamación y dolor, afectando la movilidad y causando incomodidad a largo plazo.
-Alteraciones del sueño: la luz azul emitida por las pantallas interfiere con la producción de melatonina, la hormona responsable de regular el ciclo del sueño. Esto dificulta que los niños concilien el sueño, generando alteraciones del descanso.
Según la National Sleep Foundation, la exposición a la luz azul durante la noche afecta negativamente la calidad del sueño, lo que repercute en la salud física y mental de los niños.
-Infecciones y problemas de higiene: el uso de dispositivos móviles, especialmente cuando se llevan al baño o se comparten sin una correcta higiene, aumenta el riesgo de infecciones.
Según un estudio publicado en Journal of Hospital Infection, los teléfonos móviles son uno de los objetos más contaminados con bacterias, lo que genera un aumento en el riesgo de enfermedades infecciosas.
Los más pequeños son los más vulnerables.
Los niños más pequeños son especialmente vulnerables a los efectos negativos de la exposición prolongada a las pantallas. La OMS recomienda limitar el tiempo frente a las pantallas en función de la edad de los niños:
-Menores de 18 meses: o deben estar expuestos a pantallas.
-De 2 a 5 años: Se recomienda un máximo de 1 hora diaria, siempre con supervisión y contenido educativo.
-A partir de los 6 años: El tiempo frente a las pantallas debe ser limitado, priorizando el juego al aire libre, la actividad física y las interacciones sociales.
¿Cómo prevenir los problemas posturales?
Para reducir el riesgo de sufrir trastornos posturales y otros efectos negativos derivados del uso excesivo de pantallas, es fundamental adoptar hábitos saludables.
A continuación, algunas recomendaciones basadas en los consejos de pediatras y especialistas en salud infantil:
-Limitar el tiempo frente a las pantallas: se deben establecer límites diarios según la edad de los niños, siguiendo las recomendaciones de la OMS.
-Fomentar la actividad física: el juego al aire libre y las actividades físicas regulares ayudan a mejorar la postura y mantienen la columna vertebral en buena forma.
-Usar soportes para los dispositivos: mantener los dispositivos a la altura de los ojos puede evitar que los niños inclinen la cabeza hacia adelante.
-Pausas para estiramientos: instruir a los niños a realizar pausas frecuentes para estiramientos, sobre todo en períodos largos de uso.
-Educar sobre la postura: enseñar a los niños la importancia de mantener una postura correcta desde temprana edad.
La infancia es una etapa crucial para el desarrollo físico y emocional de los niños. Invertir en buenos hábitos posturales desde temprana edad es fundamental para evitar problemas musculoesqueléticos y otros trastornos a largo plazo.
“Como adultos, tenemos la responsabilidad de educar con el ejemplo, promoviendo el uso saludable de la tecnología y fomentando un estilo de vida activo y equilibrado. Cuidar la postura de los niños es una inversión en su salud futura”, puntualizó el pediatra.
Neurodivergencia: el desafío de construir espacios más inclusivos
La neurodivergencia abarca una variedad de condiciones neurológicas que se caracterizan por diferencias en el funcionamiento del cerebro. Estas diferencias pueden afectar la forma en que una persona procesa la información, se comporta, se comunica y se relaciona con los demás. Para garantizar la inclusión y el acceso equitativo a la cultura y el entretenimiento, es fundamental adaptar los espacios a sus necesidades.
En un esfuerzo por garantizar el acceso equitativo a la cultura y el entretenimiento, el cine CinemaPop del Shopping Mariano ofrecerá una función especial de la película Capitán América: Un Nuevo Mundo, adaptada para personas neurodivergentes. Será el 15 de marzo a las 16:00. La proyección tendrá luces tenues y sonido reducido para personas neurodivergentes. Esta iniciativa busca proporcionar un espacio más cómodo y accesible para quienes pueden verse afectados por los estímulos sensoriales tradicionales de las salas de cine.
Para conocer más sobre la importancia de este tipo de iniciativas, conversamos con la psicóloga clínica Eliana Almeida, fundadora de Aprendiz Paraguay, un espacio inclusivo para compartir. Además de su trayectoria profesional, Almeida es madre de un niño neurodivergente y otro neurotípico, lo que le permite comprender de primera mano los desafíos que enfrentan muchas familias en entornos tradicionales de entretenimiento.
¿Por qué es importante contar con funciones de cine adaptadas para personas neurodivergentes?
“Socializar es un proceso vital para el ser humano. En el caso de las personas neurodivergentes, los espacios adaptados, como esta función de cine, cumplen un rol fundamental por varias razones. En primer lugar, facilitan la accesibilidad sensorial al reducir estímulos abrumadores, como las luces intensas y el sonido alto, que pueden generar sobrecarga en personas con autismo o TDAH. En segundo lugar, fomentan la inclusión social, al permitir que los asistentes puedan expresarse libremente, sin miedo al juicio o a cumplir con normas estrictas de comportamiento. Finalmente, tienen un impacto positivo en la salud mental, reduciendo la ansiedad y el aislamiento.”
Según un estudio de la Autism Society (2022), el 82% de las familias con miembros neurodivergentes evitan asistir a cines convencionales, pero el 76% sí acude cuando existen funciones adaptadas. “Esto demuestra que la demanda existe y que, con los ajustes adecuados, se puede garantizar el acceso a experiencias culturales de manera equitativa”, señala Almeida.
Los desafíos en espacios de entretenimiento tradicionales
Las personas neurodivergentes enfrentan diversas barreras en los entornos convencionales de entretenimiento. La sobrecarga sensorial es una de las más comunes, ya que las luces brillantes, los sonidos fuertes y las multitudes pueden generar crisis. Entre el 70 % y el 90 % de las personas autistas presentan hipersensibilidad auditiva.
A esto se suman normas de comportamiento rígidas que pueden generar estrés en las familias. Muchos cuidadores sienten ansiedad porque temen que su hijo pueda moverse o hacer ruidos, lo que podría generar comentarios negativos de otros espectadores. Un 58 % de los padres reportan esta preocupación en espacios como teatros y cines, agrega Almeida.
Claves para una actividad verdaderamente inclusiva
Para que un evento o actividad sea inclusiva, se requieren diversas adaptaciones. Entre las más importantes, Almeida destaca:
- Ajustes sensoriales: reducir el volumen del sonido, mantener una iluminación tenue y contar con zonas de descanso.
- Flexibilidad conductual: permitir que las personas puedan moverse libremente o expresarse sin restricciones.
- Comunicación accesible: brindar información visual con pictogramas y anticipar cambios en la programación.
- Capacitación del personal: entrenar a los trabajadores en primeros auxilios sensoriales y protocolos de asistencia no invasiva.
La clave es diseñar estos espacios en conjunto con la comunidad neurodivergente, asegurando que las medidas adoptadas realmente respondan a sus necesidades.
El impacto del diagnóstico tardío
Además de la falta de espacios adaptados, muchas personas neurodivergentes enfrentan otro desafío: el diagnóstico tardío. “Esto puede afectar múltiples áreas de la vida, desde la salud mental hasta el desempeño académico y las relaciones sociales. Sin un diagnóstico oportuno, se incrementa el riesgo de desarrollar ansiedad, depresión e incluso dificultades de integración”, explica Almeida.
Para detectar señales tempranas, recomienda a los padres observar patrones atípicos en el lenguaje, la interacción social, el procesamiento sensorial y la regulación emocional. “Los pediatras pueden aplicar escalas como el M-CHAT-R entre los 18 y 24 meses para evaluar signos de autismo, pero es fundamental que los padres también lleven un registro de conductas inusuales para facilitar el proceso de diagnóstico”.
Estrategias para manejar la sobrecarga sensorial en casa
Más allá de los espacios adaptados, las familias pueden implementar estrategias para ayudar a sus hijos a gestionar la sobrecarga sensorial en casa. Almeida sugiere las siguientes acciones:
- Crear zonas de descompresión, con iluminación tenue y sonidos regulados.
- Implementar una dieta sensorial, con sesiones de regulación propioceptiva a lo largo del día.
- Usar herramientas tecnológicas, como auriculares con cancelación de ruido y aplicaciones de monitoreo sensorial.
- Establecer rutinas visuales, con relojes y secuencias pictográficas que faciliten las transiciones entre actividades.
- Adaptar la alimentación con protocolos nutricionales específicos que apoyen la regulación sensorial.
Por último, Almeida enfatiza la importancia de la coregulación emocional, un proceso en el que los padres ayudan a sus hijos a gestionar sus emociones. “Los niños neurodivergentes necesitan sentirse comprendidos y acompañados. Modelar estrategias de regulación, crear un ambiente seguro y establecer rutinas predecibles son claves para su bienestar”.
En este sentido, herramientas como la anticipación (prever lo que pueda ocurrir), las historias sociales (ayudar a los niños a entender cómo comportarse en diferentes contextos) y los pictogramas (imágenes que representan conceptos, acciones o emociones) pueden hacer una gran diferencia. “Cuando un niño sabe qué esperar, su nivel de ansiedad disminuye y su capacidad de adaptación mejora. La inclusión no se trata solo de accesibilidad, sino de brindar apoyo en todas las áreas de la vida”, concluye la psicóloga.
La función de cine inclusiva en CinemaPop es un paso importante hacia una sociedad más equitativa y accesible para todos. Con ajustes simples, pero significativos, es posible garantizar que las personas neurodivergentes y sus familias puedan disfrutar del entretenimiento sin barreras.
Sobre la predestinación y el libre albedrío
Un auténtico dilema filosófico-teológico. La paradoja de la predestinación surge de la búsqueda del punto intermedio en la idea de un destino establecido con la noción de libre albedrío, siendo la causa de intensos debates entre tradiciones y corrientes de pensamiento de igual y distinta naturaleza.
Por Gonzalo Cáceres – periodista
Si el azar ya está determinado por Dios; por un ente todopoderoso, eterno y omnipresente, o por una ley universal (el “destino” y/o una “fuerza” o “necesidad” cósmica), entonces nuestras elecciones y acciones ya quedaron fijas de antemano. Y si nuestras elecciones y acciones están determinadas, entonces no tenemos libre albedrío y tampoco seríamos responsables de nuestras decisiones. He ahí la cuestión.
Las fuentes mejor documentadas del estudio de la predestinación se rastrean hasta los albores de la filosofía griega, aunque también en el antiguo Egipto y en las tres grandes religiones abrahámicas, además de otros dogmas politeístas de Asia y la actual Australia.
Los filósofos presocráticos y clásicos helenos reflexionaron sobre el “moira (destino)” y su relación con la causalidad. Por ejemplo, Heráclito (c. 535-475 a.C.) creía en un “logos universal” que gobierna todo y a todos, lo que sugiere una suerte de “determinismo cósmico”.
Parménides (c. 515-450 a.C.) decía que el cambio y la multiplicidad son ilusiones, lo que implica que el devenir está completamente dicho.
Por su lado, Platón (427-347 a.C.), en su mitología filosófica (en el “Mito de Er” de La República), no habla explícitamente de libre albedrío, pero sí de autodominio y elección moral. Reconoce un “destino cósmico”, pero también deja espacio para cierta responsabilidad individual en la elección de la senda futura.
Aristóteles (384-322 a.C.) introdujo la noción de causas (material, formal, eficiente y final), aunque con la salvedad de que algunas cuestiones pueden ser solo de la experiencia humana. En Ética a Nicómaco (libro III) desarrolla el concepto de “voluntariedad” y argumenta que la virtud depende de elecciones deliberadas y reconoce el peso de las influencias externas.
La filosofía estoica, en auge por nuestros días, desarrolla una visión altamente determinista del universo de la mano de Crisipo (c. 279-206 a.C.), quien defendió el determinismo riguroso (leyes físicas estrictas, cadena de “causa y efecto)” basado en la lógica y la idea de un cosmos -racionalmente- ordenado por la providencia (heimarmene). A pesar de esto, introdujo la noción de “asentimiento” (synkatathesis), donde el individuo puede aceptar su destino con sabiduría.
En lo que respecta al judaísmo y cristianismo primitivo, la predestinación se vincula con la omnisciencia y soberanía divina. En el Antiguo Testamento, pasajes como Isaías 46:10 (“Mi consejo permanecerá, y haré todo lo que quiero”) sugieren una visión donde Dios ordena.
San Pablo (siglo I d.C.), en la Carta a los Romanos (9:10-24), habla de la forma en que Dios elige a unos para la salvación y a otros para el fuego eterno, lo que influirá fuertemente en la dirección de la teología cristiana posterior.
Pero fue San Agustín de Hipona (354-430 d.C.) quien formuló una de las primeras doctrinas sistemáticas de la predestinación. Argumentó que, debido al pecado original, la humanidad está corrompida y solo la “gracia divina” puede favorecer a algunos. En este punto se desarrolla la idea de la “gracia eficaz”, donde solo Dios elige infaliblemente a los salvos (importante para la discusión posterior en el cristianismo medieval y en la Reforma Protestante).
ELECCIÓN Y CONSECUENCIA
En el pensamiento islámico, la predestinación (“al-qadar”) es un tema central. Los mutazilíes (siglo VIII-IX) defienden el libre albedrío, bajo la premisa que la “justicia divina” exige que los humanos sean responsables de sus actos. Por su lado, Los asharíes (siglo IX-X) defienden que Dios dirige todas las acciones humanas y que la libertad es solo una ilusión.
En Suma Teológica (Parte I, cuestión 83), Santo Tomás de Aquino intenta conciliar la omnisciencia divina con la libertad humana. Explica que el libre albedrío existe, pero que está guiado por la razón y, en última instancia, por Dios.
Ya en la época moderna, el estudio de la predestinación se radicaliza con la Reforma Protestante. Martín Lutero (1483-1546) en “de servo arbitrio (1525)” sostiene que el libre albedrío es una ilusión y que solo Dios decide la salvación.
Por la misma línea anda Juan Calvino (1509-1564) con su doctrina de la “doble predestinación”, según la cual Dios elige a algunos para la salvación y a otros para la condena eterna.
Algo menos radical fue el jesuita español Luis de Molina (creador del “Molinismo”), quien entendió que Dios tiene conocimiento “medio”, es decir, sabe lo que cada persona haría en cualquier circunstancia, pero sin determinar directamente sus pasiones y elecciones, dejando a entrever la facultad de elegir y asumir las consecuencias.
Entre los distintos representantes de la escuela determinista hubo quien manifestó la existencia de Dios “fuera del tiempo” y, por lo tanto, su conocimiento de los eventos futuros no implica que los determine. Consecuentemente, la responsabilidad moral sería solo una construcción social útil, pero no tendría una base metafísica real (se distingue entre un “nivel absoluto” donde todo está determinado y un “nivel humano” donde experimentamos la libertad).
Quien intente conciliar predestinación y libre albedrío entiende que ambos pueden coexistir, aunque el plan divino influya en las decisiones humanas. Podría ser bajo el argumento de que todas las acciones están causadas por eventos previos (lo que parece eliminar el libre albedrío). Esto lleva a la pregunta: si todo está determinado por leyes causales, ¿tiene sentido hablar de responsabilidad moral?
El mejor pacto está en la percepción de que el conocimiento de Dios (o de un ente superior) no es causal: saber lo que va a ocurrir no significa que lo esté determinando. De la misma forma en que alguien puede conocer bien a un amigo y -predecir sus acciones, sin obligarlo a hacerlas-, Dios podría conocer el futuro sin eliminar la libertad humana.
Tal vez, la verdadera libertad no radique en desconocer el porvenir, sino en la forma en que experimentamos cada decisión. No importa si hay un destino final: mientras sigamos sintiendo el peso de nuestras elecciones, la libertad seguirá siendo parte de nuestra experiencia.
Bancos, comercios, servicios y otros rubros en la mira ante el avance de la inteligencia artificial
El auge de la IA pone en jaque diversos sectores laborales que, en el futuro, serán reemplazados por aparatos, software u otros sistemas automatizados. En Paraguay, este escenario ya comienza a verse, principalmente en el campo, donde máquinas agrícolas, tractores que se manejan con dispositivos o alguna tecnología, van dejando a muchas personas desocupadas.
Por Silvia Aguilar – @aguilar_silvii
El 2025 sigue su curso en medio de grandes cambios en los mercados laborales del mundo, afectados en mayor medida por el avance de la automatización y la inteligencia artificial (IA).
La gran mayoría de los empleadores anhelan que la tecnología, los robots y los sistemas software transformen sus negocios, reduciendo costos y agilizando, quizás, la producción, sin embargo, varias personas podrían quedar sin empleo debido al reemplazo de sus tareas.
Para el especialista en empleo, Enrique López Arce, Paraguay no está excluido de los cambios con la IA ni de los efectos que pueda ocasionar en los más vulnerables, los trabajadores.
Según mencionó, los comercios minoristas como cajeros o repositores, los trabajadores que prestan servicios de atención al cliente, los operadores de datos, bancarios, recepcionistas, y aquellos del sector rural, corren el mayor riesgo.
“Máquinas agrícolas, tractores que se manejan solos, han aumentado la desocupación en el campo. Lo mismo se siente en el sistema bancario, que es el sector que más invierte en tecnología. Hay una disminución en este sector, las terminales automáticas, depósitos ya se pueden hacer por estas terminales también. Están reduciendo la cantidad de posiciones de caja”, expresó López Arce.
En Paraguay hay 906.000 personas trabajando en comercios, 773.000 en servicios, 296.000 en industrias y 460.000 trabajadores en el sector primario, según el especialista en empleo.
QUINTA REVOLUCIÓN INDUSTRIAL
Si bien el avance de la automatización y de la IA traerá consigo efectos negativos en varios trabajadores del país, habrá también nuevas demandas laborales.
López Arce hizo mención al Informe del Foro Económico Mundial de enero de 2025 que señala que, el 40% de lo que anteriormente te permitía acceder a un empleo, cambiará para el 2030.
Según el informe, para el 2030 se generarán 170 millones de empleos en todo el mundo gracias a la automatización y la IA
“Comerciales harán propuestas a sus clientes con IA, por lo que los que no sepan trabajar con ellas serán excluidos. La competencia comercial obligará a subir estándares. Máquinas agrícolas, plantas industriales, marketing con IA, será la constante en este inicio de la quinta revolución industrial”, agregó.
Según mencionó, el trabajo rutinario y manual disminuirá con el correr de los años y el 77 % del empleo comercial se realizará con la IA.