
El sábado 15 de marzo se llevó a cabo una vigilia en el Zócalo de la Ciudad de México y más de veinte ciudades en todo el país para simbolizar el luto de miles de familias que tienen algún ser querido en calidad de desaparecido, situación que ha obligado a conformar colectivos de buscadoras de personas, quienes se desempeñan con palas, picos y otros instrumentos que han tenido que desarrollar.
De acuerdo con los reportes, se estima que en México existen 124 mil 300 personas en calidad de desaparecidas, crisis que tuvo un nuevo episodio con el hallazgo de miles de fragmentos óseos y cientos de piezas de calzado y prendas en el Rancho Izaguirre en Teuchitlán, Jalisco, donde se presume sirvió como un centro de entrenamiento y exterminio para el crimen organizado.
El pasado viernes, la presidenta de la República, Claudia Sheinbaum Pardo atajó las versiones de que el predio situado a menos de 60 kilómetros de Guadalajara, capital de Jalisco, fue utilizado como un centro de exterminio y pidió esperar los análisis periciales para determinar si fue escenario donde decenas de personas desaparecidas fueron privadas de la vida.
Este lunes la mandataria federal dio a conocer un decreto para fortalecer la Comisión Nacional de Búsqueda, ésto con el objetivo de ampliar su capacidad de atención y la compra de equipos tecnológicos para acompañar la búsqueda de personas con evidencias científicas.

La presidenta Claudia Sheinbaum presentó el lunes un conjunto de “acciones inmediatas” destinadas a abordar la problemática de las desapariciones de personas en México.
Además, la presidenta adelantó que el jueves remitirá al Congreso un paquete de reformas legislativas que incluye iniciativas claves como la implementación de un certificado único de registro poblacional para facilitar la localización de personas desaparecidas, la creación de una base de datos única de información forense y el fortalecimiento de un centro especializado en identificación humana.
Además, se propondrá la eliminación del plazo de 72 horas para abrir investigaciones por desaparición, la emisión de alertas inmediatas y la equiparación del delito de desaparición con el de secuestro, homologando las penas.
“Nuestro sentir está con las familias de las personas desaparecidas. Sabemos de su necesidad y su anhelo de reencontrarse con sus seres amados”, declaró Sheinbaum.
Con relación con el caso de Teuchitlán, Sheinbaum informó que se brindará el miércoles un reporte detallado sobre los avances en la investigación realizada por las autoridades locales.
Sobre ese caso, la fiscalía del estado de Jalisco lanzó una plataforma digital que permite consultar fotografías e información sobre los “indicios recolectados” en el rancho, como zapatos, ropa, mochilas y maletas, facilitando así el acceso a la información a quienes buscan a sus familiares.