¿Qué está pasando en Latinoamérica y el Caribe?
La región de América Latina y el Caribe, la más desigual del mundo y la segunda más vulnerable a desastres, enfrenta crisis cada vez más graves. Con la inseguridad alimentaria y la violencia alcanzando niveles sin precedentes, se estima que 27,6 millones de personas necesitarán ayuda humanitaria en 2025. Para responder a estas necesidades, se requieren más de 2,16 mil millones de dólares. La combinación de fenómenos climáticos extremos, violencia, bajo crecimiento económico, desigualdad, inestabilidad política y migraciones masivas está aumentando los riesgos y limitando la capacidad de respuesta y recuperación ante crisis y desastres.
¿Qué son los Fondos Humanitarios?
Los Fondos Humanitarios de País (CBPF, por sus siglas en inglés) y los fondos regionales gestionados por la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés) desempeñan un papel clave al proporcionar financiamiento humanitario estratégico y flexible. Estos fondos distribuyen 1,3 mil millones de dólares al año, con un enfoque prioritario en apoyar a las ONG locales y nacionales que están en la primera línea de respuesta, garantizando así una acción humanitaria lo más local posible y tan internacional como sea necesario.
Actualmente, OCHA administra 16 CBPF, además de cuatro fondos humanitarios regionales que amplían los beneficios de los fondos comunes a países que no cuentan con ellos, permitiendo una distribución rápida de recursos a nuevos actores. En 2024, se creó el Fondo Humanitario Regional para América Latina y el Caribe (RHPF LAC, por sus siglas en inglés) con el objetivo de fortalecer la respuesta humanitaria en la región.
¿Qué significa esto para la región?
El RHPF LAC ofrece una plataforma estable y flexible para los donantes que buscan responder a emergencias humanitarias en la región, ya sean desastres repentinos, escaladas de crisis o crisis prolongadas. Actualmente, el RHPF LAC cuenta con dos ventanas específicas para Colombia y Haití. Este fondo está diseñado para complementar otras fuentes de financiamiento humanitario, como el financiamiento bilateral y el Fondo Central para la Acción en Casos de Emergencia (CERF, por sus siglas en inglés). Además, busca atraer nuevos recursos de donantes, incluyendo Estados miembros de la región, el sector privado y la sociedad civil de los países afectados.
¿Cómo funciona el Fondo Humanitario Regional para América Latina y el Caribe?
El RHPF LAC es gestionado desde la oficina regional de OCHA en Panamá y cuenta con ventanas nacionales que pueden ajustarse según la evolución de las necesidades, el interés de los donantes y la capacidad de los socios. El fondo está supervisado por el/la Coordinador(a) Residente de las Naciones Unidas o el/la Coordinador(a) Humanitario(a) en los países correspondientes, con el apoyo de una Junta Asesora y en coordinación con los mecanismos nacionales. Inicialmente, Colombia y Haití son las principales prioridades. Con el tiempo, otros países podrán incorporarse en función de las necesidades humanitarias y el interés de los donantes. Asimismo, el RHPF LAC podría expandirse para apoyar respuestas ante fenómenos como El Niño o huracanes que afecten a varios países.
Haití
Desde 2021, las necesidades humanitarias en Haití han seguido aumentando debido a la violencia de los grupos armados, que ha provocado el colapso de los servicios básicos y ha incrementado gravemente los riesgos de protección. Para 2025, se estima que 6 millones de personas necesitarán ayuda humanitaria. Cerca de 5,5 millones—casi la mitad de la población—enfrentan inseguridad alimentaria, y 1 millón de personas han sido desplazadas.
A esta crisis se suman los efectos devastadores de desastres naturales recurrentes, como terremotos, huracanes e inundaciones, que han debilitado aún más a la población. Sin una acción firme para reducir la violencia, garantizar financiamiento y crear un entorno favorable para la ayuda humanitaria, la situación seguirá deteriorándose.
El financiamiento para Haití está destinado a atender las necesidades humanitarias más urgentes mediante un enfoque multisectorial y coordinado, con prioridad en las áreas y sectores más afectados. Este fondo permitirá canalizar recursos a los socios mejor posicionados, dando especial prioridad a las organizaciones locales, para llegar a las comunidades más vulnerables y en riesgo.
Colombia
En Colombia, el conflicto armado, los fenómenos climáticos extremos, la presión migratoria y la pobreza persistente—especialmente entre las comunidades indígenas—siguen impulsando la crisis humanitaria. Estas necesidades son más graves en las zonas donde los grupos armados no estatales ejercen control, limitando el acceso a servicios esenciales. Para 2025, se estima que 8,5 millones de personas necesitarán asistencia humanitaria.
El financiamiento para Colombia busca responder a las necesidades urgentes derivadas del conflicto y los desastres, al tiempo que brinda apoyo a las personas desplazadas, migrantes y refugiados vulnerables, priorizando la ayuda según las necesidades y no según el estatus migratorio, especialmente en las zonas con múltiples crisis superpuestas. También toma en cuenta los déficits de financiamiento existentes.
Más allá de fortalecer la respuesta local a través de la capacitación de actores nacionales y locales, este enfoque promueve una mayor participación de los socios locales para garantizar una gestión de la ayuda más inclusiva y sostenible.
Este fondo se alinea con la iniciativa Flagship, que busca innovar en la programación comunitaria e identificar soluciones duraderas a los desafíos humanitarios.
- UN Office for the Coordination of Humanitarian Affairs
- To learn more about OCHA’s activities, please visit https://www.unocha.org/.
