A finales de la década de los años 40, la industria del cine argentino vivía uno de sus períodos de mayor esplendor. En los estudios de Buenos Aires se filmaban películas con directores como Hugo del Carril, Daniel Tinayre y Leopoldo Torre Nilsson, mientras que estrellas como Tita Merello y Niní Marshall brillaban en la gran pantalla.
El primer gobierno de Juan Domingo Perón impulsaba políticas de fomento a la producción cultural y el cine no era la excepción.
Fue en ese contexto que nació el proyecto de “Ciudad Gaucha“, una idea ambiciosa que prometía convertir a Moreno en la meca del cine sudamericano.
El sueño de un Hollywood en el conurbano
La iniciativa fue impulsada por la productora “Imágenes Argentinas“, que adquirió 338 hectáreas en La Reja con el objetivo de construir un complejo cinematográfico de primer nivel.
Según los anuncios de la época, la ciudad de cine se instalaría en Avenida Carlos Gardel, en un predio elegido por su clima favorable y su amplitud territorial, lo que permitiría construir escenarios de gran magnitud.
El nombre Ciudad Gaucha se definió por concurso público y la propuesta fue presentada en un cocktail en el Plaza Hotel, ante un auditorio colmado de empresarios y figuras del espectáculo, que el Archivo General de la Nación difundió por estas horas en redes sociales, con una copia remastetizada.
Se mostraron los planos arquitectónicos y se explicó el impacto económico que tendría el proyecto. La empresa prometió que el 40% de las utilidades del “Hollywood morenense” serían distribuidas entre los trabajadores.
Un ambicioso proyecto con apoyo estatal
El plan se inscribía dentro del concepto industrialista del primer peronismo, que veía al cine como una herramienta estratégica de identidad nacional y posicionamiento internacional. Argentina competía con México por el liderazgo del cine en habla hispana, y el modelo de Hollywood había servido de inspiración para la organización del negocio cinematográfico en el país.
Desde el gobierno peronista se promovieron leyes para fortalecer la producción de películas nacionales, con incentivos a las productoras y restricciones a la importación de filmes extranjeros.
Sin embargo, la idea de construir un polo cinematográfico fuera de la Ciudad de Buenos Aires era una apuesta riesgosa…
“Ciudad Gaucha”: del anuncio al olvido
Pese al entusiasmo inicial, el megaproyecto nunca llegó a materializarse. Aunque algunos decorados llegaron a construirse, el emprendimiento enfrentó problemas financieros y la falta de infraestructura adecuada.
Para comienzos de la década del 50, el sueño de un Hollywood en Moreno ya estaba en el olvido.
El crecimiento urbano de la zona terminó por borrar los pocos vestigios que quedaron del proyecto.
Con el tiempo, la historia de Ciudad Gaucha quedó reducida a las páginas de antiguas revistas y anuncios publicitarios de una época en la que el país soñaba en grande.
Hoy, aquel intento de convertir a Moreno en el epicentro del cine sudamericano es un capítulo curioso (y poco conocido) de la historia cinematográfica nacional.
En tiempos de ninguneo a todo tipo de arte popular, el cine argentino, a pesar de sus vaivenes, siempre buscó proyectarse más allá de sus propias fronteras. A veces con más éxito que otras…
FUENTE: INFOCIELO