Un turista estadounidense fue detenido después de presuntamente colarse en una isla aislada en un intento de conocer a una tribu remota que no tuvo contacto por el mundo moderno, y dejar un coco y una lata de Coca-Cola Light.
Mykhailo Viktorovych Polyakov, un joven de 24 años que publicó contenido de viajes en YouTube, se coló en el territorio restringido de la Isla Sentinel del Norte, parte de las Islas Andamán de la India, para intentar conocer a los sentineleses, según informó la policía india a CBS . Se cree que hay unas 150 personas en la isla.
Fue por eso que descendió de su bote monoplaza y dejó una lata de Coca light y un coco antes de intentar atraer a los sentineleses con un silbato y unos binoculares. No tuvo éxito con eso.

Llegó, bajó del bote cinco minutos, dejó su ofrenda, se llevó un poquito de arena, grabó un video y se retiró en el más profundo anonimato.
Arrestado: esto dijo la policía
Por esto, Polyakov fue arrestado el domingo, informó Press Trust of India. Visitar la isla de los sentineleses está prohibido y la Ley se lo hizo saber.
El mismo medio informó que el joven fue visto el 29 de marzo pasada la medianoche saliendo de una playa del sur de Andamán en un bote para una persona.

«Estamos obteniendo más detalles sobre él y su intención de visitar la zona tribal reservada. También estamos intentando averiguar qué otros lugares visitó durante su estancia en las islas Andamán y Nicobar», dijo HS Dhaliwal, director general de la policía de las islas.
Se cree que Polyakov llegó a la ciudad de Port Blair el 26 de marzo para tener contacto con la tribu, pero “pareció ser ignorado por el pueblo sentinelés”, informó la policía después de confiscar su cámara GoPro.
Se concluyó que su viaje fue planeado meticulosamente. Polyakov hizo estudios sobre la condición del mar, las mareas y la accesibilidad de la playa para llegar a la isla sin problemas.

El archipiélago Sentinel del Norte pertenece al distrito administrativo de Andamán del Sur y gestiona sus propios asuntos.
Las autoridades indias reconocieron el deseo de los isleños de vivir sin contactos con el mundo exterior y restringieron su rol de relaciones internacionales sin responsabilizarse de posibles muertes en caso de visitas inesperadas.