Ese día, para una mujer, empezó de la misma forma que los anteriores. Aquella vez, como era habitual en su caso, se levantó temprano en su casa. Todo parecía normal, rutinario, aunque pronto ocurrió algo que cambió los planes: luego de haber tendido su cama, ella cayó al suelo y no pudo pararse más. Estaba consciente, pero parte de su cuerpo no respondía.
Una ciudadana de Estados Unidos sufrió un repentino e inesperado problema de salud justo después de haberse despertado por la mañana, según su relato. La protagonista del hecho compartió la historia a través de las redes y medios locales con la intención de concientizar a los demás sobre cómo actuar ante una situación similar.
Krista Figari tiene 39 años y vive en Nueva York, de acuerdo con una publicación de la cuenta oficial de Instagram del Hospital Presbiteriano de Nueva York (NewYork-Presbyterian Hospital, NYP por su sigla en inglés).
El 18 de abril de 2024, la ciudadana neoyorquina se despertó cerca de las cinco de la mañana en su departamento y enseguida ordenó su cama. A continuación, agarró su teléfono celular, dio unos pasos en su habitación y comenzó a tambalearse.
Segundos más tarde, ella terminó tirada en el suelo, tal como quedó registrado mediante las cámaras de seguridad de su vivienda. «Se desorientó y cayó al piso, perdiendo el control del lado izquierdo de su cuerpo«, aclaró el NYP en un posteo de Instagram.

En ese instante, Krista no conseguía volver a ponerse de pie. Acababa de perder la sensibilidad de su mano, brazo y pierna izquierda. A raíz de la circunstancia, se hallaba desconcertada. «A esta altura, yo pensaba: ‘Esto es raro‘», recordó la mujer en una reciente entrevista con el diario New York Post.
A pesar de estar confundida y debilitada, la mujer reaccionó para intentar pedir ayuda. Afortunadamente, logró estirar su mano derecha y de esta manera recuperó su teléfono celular, que se encontraba tirado cerca de ella. Luego, marcó el número de emergencias (911) y también llamó al portero de su edificio.
Como la puerta del departamento de Krista estaba cerrada y ella no llegaba a agarrar las llaves, los paramédicos tuvieron que entrar por una de las ventanas del lugar. El portero les había facilitado el ingreso a la vivienda a través de la escalera de incendios, ubicada en el exterior del edificio.
Qué diagnóstico recibió la mujer
La ciudadana neoyorquina fue trasladada a Hospital Presbiteriano de Nueva York. Una vez allí, tras unos chequeos médicos, los trabajadores de la salud del centro médico le explicaron a la paciente que había sufrido un accidente cerebro vascular (ACV) mientras dormía.
Qué es un accidente cerebro vascular: causas, tipos y síntomas
«Un ACV es una urgencia médica que se produce cuando algo impide que el cerebro reciba suficiente flujo sanguíneo. Un vaso sanguíneo obstruido o una hemorragia cerebral pueden provocar accidentes cerebrovasculares», informó el centro médico académico estadounidense Cleveland Clinic por medio de un artículo de su página oficial.
A su vez, la entidad comunicó: «Los ictus (ACV) son la segunda causa principal de muerte en todo el mundo y la quinta más común en los EE. UU. (…) Los ACV son potencialmente mortales y pueden ser mortales. Cuanto antes se diagnostique y se trate a una persona, mayor será la probabilidad de que sobreviva. Cada segundo cuenta«.

Hay dos tipos de ACV: el isquémico, que sucede cuando se obstruye un vaso sanguíneo ―un coágulo bloquea el flujo de sangre― y el hemorrágico, cuando se produce una ruptura de un vaso sanguíneo. «Durante un ataque cerebral (ACV) isquémico, los vasos sanguíneos del cerebro se bloquean o estrechan. En un ataque cerebral (ACV) hemorrágico, se produce una pérdida de sangre en el cerebro«, aseveró la entidad médica estadounidense Clinica Mayo (Mayo Clinic) en su sitio web.
«Afasia (dificultad para hablar o pérdida total del habla); visión borrosa o visión doble (diplopía), confusión o agitación; coma; mareo o vértigo; dolores de cabeza (normalmente repentinos e intensos); pérdida de control muscular en un lado de la cara; pérdida de coordinación; pérdida de coordinación o torpeza (ataxia), pérdida de memoria (amnesia); cambios de humor o de personalidad repentinos, náuseas y vómitos; rigidez de cuello; desmayo; convulsiones; lenguaje arrastrado o confuso (disartria); empeoramiento repentino o pérdida de los sentidos (visión, oído, olfato, gusto y tacto, entre otros); y debilidad o parálisis en un lado de la cara y el cuerpo», enumeró.
Con respecto a Krista, su ACV era isquémico. «Las pruebas revelaron que el ACV (isquémico) de la mujer había sido causado por un foramen oval, un pequeño orificio en el corazón«, indicó el NYP en su posteo de Instagram.
Este orificio, llamado agujero oval persistente, «es una pequeña abertura con forma de hojuela entre las cavidades superiores del corazón», según la Clinica Mayo. «Lo normal es que se cierre durante el primer año de vida. Cuando el agujero oval no se cierra, esto se denomina agujero oval persistente», agregó la entidad sobre esta afección, que puede ocasionar diversos problemas de salud.

«En ocasiones, pequeños coágulos de sangre en las venas pueden viajar hacia el corazón. Pueden atravesar un agujero oval persistente e introducirse en el lado izquierdo del corazón. Desde allí pueden viajar hasta el cerebro, bloquear el flujo sanguíneo y provocar un accidente cerebrovascular isquémico«, manifestó la Clinica Mayo.
Cómo se recuperó la mujer
A Krista le suministraron tenecteplasa ―es un fármaco trombolítico― para disolver el coágulo que tenía en su cerebro.
«Cinco días después, Krista fue dada de alta. Se recuperó y solamente quedó con una ligera debilidad en la mano izquierda y una leve caída de la cara. Síntomas que, de acuerdo con la paciente, hoy son indetectables. Para reducir el riesgo de sufrir un ACV en el futuro, Krista volvió al hospital en julio de 2024 para someterse a un procedimiento mínimamente invasivo destinado a cerrar el agujero oval persistente«, advirtió el NYP.
«Definitivamente fue aterrador. Cuando me mencionaron ‘ACV’, no lo pude procesar. Yo asocio un ACV con alguien que es un adulto mayor, así que eso fue lo último que pensé que me iban a diagnosticar», reflexionó la mujer en conversación con el New York Post.
Por otro lado, Krista dijo que eligió divulgar su historia para crear conciencia. «Incluso si sentís una pequeña cosa… si sentís que algo está mal, buscá ayuda. Creo que a menudo pensamos que somos invencibles y que solamente por no tener cierta edad no nos puede pasar algo. Pero nunca se sabe lo que puede suceder», declaró al portal de noticias de salud estadounidense Healthline.