Carlos Pinto, de la Cámara de Expendedores de Combustibles de Neuquén y Río Negro, explicó los alcances de la nueva normativa que habilita el autoservicio en estaciones. Advirtió que dependerá de la capacidad económica de cada comercio.
La reciente normativa nacional que habilita el autoservicio en estaciones de servicio generó expectativas y preguntas en el sector energético de la región.
En diálogo con este medio, Carlos Pinto, integrante de la Cámara de Expendedores de Combustibles de Neuquén y Río Negro, aclaró que la implementación no es obligatoria, pero sí está sujeta al cumplimiento de una serie de requisitos de seguridad y supervisión.
“El autoservicio puede ser una alternativa viable para algunas estaciones, pero tiene que haber personal presente que oriente al usuario y garantice que el proceso de carga se realice en condiciones seguras”, subrayó Pinto.
Según explicó, la normativa ya fue publicada y vienen acompañadas por directrices sobre cómo debe implementarse el servicio, incluyendo la necesidad de contar con sistemas de corte automático y personal capacitado para intervenir ante cualquier inconveniente.
En este contexto, las empresas proveedoras de equipamiento ofrecen diferentes soluciones tecnológicas. Algunas estaciones podrían optar por tótems adaptables a los sistemas actuales, una alternativa más económica, mientras que otras podrían invertir en sistemas de autoservicio más sofisticados, similares a los que ya funcionan en otros países.
“La decisión final dependerá de la capacidad económica de cada estación, que deberá evaluar qué opción es la más adecuada según su tamaño, volumen de ventas y perfil de usuarios”, agregó en FM Sayhueque.
La medida busca modernizar el sistema de expendio de combustibles en la Argentina, ofreciendo una opción más ágil, aunque sin dejar de lado la seguridad operativa y el rol del personal en el control del proceso.