Newcastle goleó por 4-1 a los Red Devils, que pagaron caro los errores en defensa y nada pudieron hacer ante los locales. Mirá el video con lo más destacado del partido.
ANDY BUCHANAN/AFP fotos
EFE
Un doblete de Harvey Barnes y los aciertos de Sandro Tonali y Bruno Guimaraes acabaron con la ilusión del Manchester United de Manuel Ugarte, que fue machacado este domingo por 4-1 en St. James’ Park por el Newcastle, que se ubicó en la cuarta plaza de la tabla de posiciones de la Premier League y apunta a disputar la próxima edición de la Champions League.
El delantero fue el máximo exponente de otra exhibición del Newcastle ante los Reds, que ya habían caído por 2-0 en la primera ronda en Old Trafford y esta vez se fueron con un 1-1 al descanso gracias al gol del descuento de Alejandro Garnacho.
La ilusión duró poco. Pese al empate parcial, la visita se encontró con un rival dominador, ganador de casi cada duelo y acosador durante la primera hora de partido, en la que había encontrado la ventaja por intermedio de Sandro Tonali en el minuto 24.
Fue tras un error de Ugarte, que erró en una transición desde la defensa al medio campo. La pelota terminó en los pies de Kieran Trippier, que se la cedió a Isak. El sueco se sacó de la manga una asistencia por encima de la defensa que culminó Tonali con una certera volea.
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El tránsito por los vestuarios sentó mejor a Newcastle, que, muy pronto, en una buena triangulación entre Tino Livramento, Jacob Murphy y Harvey Barnes, con gol para el último, volvió a adelantarse en el marcador.
El entrenador Ruben Amorim reaccionó con la entrada de Patrick Dorgu, Mason Mount y Rasmus Hojlund. No aportaron nada, porque el Newcastle era una aplanadora. Y un resbalón de Noussair Mazraoui que aprovechó Barnes, simbolizó el tono del partido: fallos constantes del United y la efectividad de los locales.
Barnes aceptó un regalo que le dejaron servido y con una potencia impresionante, se marchó entre Christian Eriksen, Leny Yoro y Victor Lindelof. Culminó su doblete con un zapatazo tremendo que machacó al United, que aún recibiría un cuarto tanto tras otro error: el debutante Altay Bayindir falló en un pase y Bruno Guimaraes no lo desaprovechó para cerrar un 4-1 con el que el Newcastle dio un paso más hacia el paraíso: es un equipo con aroma a Liga de Campeones.
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