En medio de un clima económico desafiante, el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, respondió a las declaraciones del presidente Javier Milei, quien había advertido sobre la posible restitución de retenciones en junio próximo.
Pino afirmó que «el campo no va a liquidar porque liquidan los exportadores», señalando que la decisión de liquidar las exportaciones no recae directamente en los productores agropecuarios, sino en los exportadores.
Además, destacó que todos los porcentajes de cosecha «están por arriba» de los del año pasado, lo que indica una mejora en la producción agrícola.
Estas declaraciones surgen en respuesta a las advertencias de Milei sobre la reimplementación de retenciones, una medida que había sido parcialmente reducida por su gobierno en enero pasado. En ese entonces, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció una disminución temporal de los impuestos a la exportación de los principales cultivos del país, incluyendo la soja, trigo y maíz, hasta finales de junio.
La SRA y otros representantes del sector agropecuario han expresado su preocupación por la presión impositiva y las restricciones cambiarias que afectan la rentabilidad del campo. La posibilidad de reinstaurar las retenciones genera incertidumbre en el sector, que busca condiciones más favorables para la producción y exportación.
La relación entre el gobierno de Milei y el campo se encuentra en un momento crítico, con diferencias marcadas sobre las políticas económicas y fiscales que afectan al sector agropecuario.
La Fusión del INTA con el INTI: Preocupaciones y Rechazo
Por otro lado, el reciente decreto 70/2025 confirmó la fusión del INTA con el INTI, como parte del plan de ajuste fiscal del Ejecutivo. Este cambio implica la creación de un nuevo organismo, el Instituto Nacional de Convergencia Tecnológica y Desarrollo Estratégico (INCyTDE), que integrará también a la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE).
El INTA ha sido una institución clave para el desarrollo del sector agropecuario, destacándose por su investigación, innovación tecnológica y asistencia técnica. Su fusión con el INTI ha generado preocupación en diversos sectores, que temen que esta medida diluya la efectividad de ambos organismos.
Tanto el INTA como la CONAE han expresado su rechazo, advirtiendo que esta reorganización podría afectar negativamente sus objetivos específicos: el desarrollo agrícola sostenible y la investigación espacial estratégica.
Impacto en el Sector
La posibilidad de reinstaurar retenciones, sumada a la incertidumbre sobre el futuro del INTA, coloca al sector agropecuario en una encrucijada. Los productores enfrentan presiones fiscales y temen perder herramientas clave para el desarrollo tecnológico y la competitividad en un mercado globalizado.
Con estas medidas, el gobierno de Milei busca racionalizar recursos y reducir el gasto público, pero la reacción del campo y de instituciones científicas destaca la importancia de mantener estructuras que han sido fundamentales para la producción y el avance tecnológico en el país.