«Mamá, tenemos que comprar las cosas para el cumple de papá«. Brisa Vaccarini (16) se levantó decidida la mañana del sábado 26 de abril. Salió caminando con su mamá, Mónica Bustos (54), tomadas del brazo, como siempre, en Berazategui. También iba su hermano Lautaro (22). Estaban de espaldas, así que no vieron venir la tragedia. Fueron segundos. Una camioneta blanca perdió el control y las impactó: la chica murió y su madre sufrió graves heridas.
El dolor de los familiares de la víctimas se mezcló con la indignación cuando supieron que el conductor, Javier Francisco González (43), estaba borracho. El test de alcoholemia le dio 2,39. En la Provincia hay tolerancia cero.
Además, otro dato le sumó un componente insólito: la Fiat Ducato Cargo no era de este hombre, al que -según testigos- acompañaban dos amigos, sino de un cliente que se la había dejado para tapizar.
Las imágenes de las cámaras de seguridad de los negocios de la zona son contundentes. Muestran cuando las dos mujeres van caminando, con el joven al lado, y la camioneta sale disparada contra ellas, en la calle 53 al 2100, casi 121, del barrio Marítimo, en Hudson.

«Estábamos organizando el cumpleaños de mi papá, que era el domingo 27. Iban a comprar carne picada para hacer empanadas y, de paso, mi hermana se iba a cortar el pelo», contó Fernanda Vaccarini (30) a Clarín.
El impacto fue brutal. Brisa salió despedida y quedó tendida en el piso, boca abajo. Murió en el acto. Su mamá quedó incrustada en la reja de la casa contra la que chocó el vehículo.

«Un hombre la ayudó porque ella se quejaba del dolor. La recostó en el piso y le dijo a mi hermano, que se quedó parado mirando todo y no sabía qué hacer: ‘agarrá de la mano a tu mamá, hablale‘. Y mi mamá lo único que hizo es levantar la cabeza un poco para mirar a ver dónde estaba mi hermana», añadió Fernanda.
Mónica buscó a Brisa, que iba a cumplir 17 años en pocos días (el 18 de mayo), con su mirada. La vio tirada en el piso. «¡Me mataron a mi bebé, ese hijo de puta mató a mi bebé!«, gritó y se desmayó.

La mujer fue trasladada al Hospital Evita Pueblo. Sufrió fractura de cadera y de tres costillas. Están esperando que se recupere y le den el alta para poder despedir a Brisa, pero los médicos aseguraron que es imposible que salga ahora por su estado de salud.
El cuerpo de la adolescente quedó tirado desde las 16.10, hora de la tragedia, hasta cerca de las 20, cuando el médico forense llegó.

«Estamos haciendo todo lo posible para que tenga una despedida digna y que se haga justicia, nada más. Que esta persona pague por lo que hizo», advirtió Fernando.
Los vecinos ayudaron con una colecta para los gastos del sepelio y de internación de Mónica.
«Somos personas trabajadoras que no sabemos cómo vamos a costear esto. La gente lo está dando todo, estamos muy agradecidos», sostuvo. Para ello, pusieron a disposición un alias de Mercado Pago (fermon.28), a nombre de ella (Mónica Fernanda Vaccarini), para quien pueda colaborar.

«El dueño mandó la camioneta al tapicero. Una vecina los vio salir de la tapicería y estaban alcoholizados. Salieron a pasear y ahí es donde cometen semejante tragedia», se lamentó Fernanda.
El caso, caratulado «homicidio culposo» (es decir, cometido sin intención), es investigado por la fiscal Karina Santolin, de la UFI N° 7 de Berazategui.
«Es un asesino. Más allá de que lo hayan caratulado como que esta persona no era consciente, que no tuvo la intención, al momento que se alcoholizó sabía que si agarraba un vehículo podía matar a alguien, y es lo que pasó. Le sacó todo a la familia, la posibilidad a un adolescente de tener un futuro», afirmó su hermana.

Este martes, Mónica -mamá de ocho hijos, uno de los cuales murió hace una década- seguía internada. La pasaron a una sala común. «Está destruida anímicamente, quiere justicia. Es lo único que pide», cerró Fernanda.
Brisa iba a quinto año en el secundario. «Vivía estudiando. Quería estudiar algo que la ayudara a darle una mejor vida a su mamá», dijo su hermana. Este martes, desde las 21, la velarán en Hudson. Su papá, Sergio Daniel Vaccarini, cumplió 60 años el domingo. No hubo nada para festejar.
EMJ