Portaferrissa, 11. Sobre la entrada principal de lo que hoy es una pensión, dos niños sostienen diversas herramientas junto a una pequeña construcción. Cualquier persona que conozca el significado simbólico de esta composición escultórica sabrá que se trata de una alegoría de la sociedad secreta de los masones.
Se trata de un edificio de 1867 promovido por el constructor Domènec Sitjàs i Margenat que sustituyó a uno anterior que se erigía en la esquina de Portaferrissa con Bot. La composición del relieve escultórico no ofrece lugar a dudas. Es de claro contenido masónico, en primer lugar porque trata de la albañilería, oficio que se relaciona con los orígenes en los constructores medievales de catedrales de la sociedad secreta.

El relieve lleva la firma de J. Roig, lo más probable que se trate de Joan Roig, un escultor muy prolífico en aquella época en Barcelona
Xavi Casinos
Las herramientas que sostienen los niños son las que utilizan los masones en sus trabajos simbólicos. Uno de los niños sostiene un compás con la mano derecha y una paleta en la izquierda. En su significado filosófico, el compás marca los límites de cada masón y con la paleta se extiende la solidaridad fraternal entre los miembros de la sociedad. El segundo niño sostiene con la mano derecha un nivel en forma de cartabón y en la izquierda una regla. El cartabón, ya sea usado como escuadra o nivel, indica el camino recto que debe seguir la moral de los masones. La regla, normalmente de 24 divisiones, señala los trabajos y actividad de los hermanos a lo largo del día.
El relieve lleva la firma de J. Roig. Es más que probable que se trate de Joan Roig, un escultor muy prolífico en aquella época en Barcelona. Trabajaba para la burguesía, especialmente, pero no solo, en escultura funeraria. El conjunto de Portaferrissa encaja en su actividad. Una de sus obras más conocidas en la capital catalana es la escultura La dama del paraigües, que se encuentra en el parque de la Ciutadella. También participó en parte del pedestal que sostenía la estatua de Antoni López, retirada hace unos años por su pasado esclavista. Es igualmente autor de algunas de las esculturas que adornan la fachada de la catedral.