Sin Luis Suárez, el Inter Miami alargó su mala racha de resultados al ser goleado este sábado 4-1 en su visita al Minnesota United, lo que significó la derrota más abultada de Lionel Messi en la liga norteamericana (MLS).
El astro argentino convirtió el único gol del Inter Miami en el minuto 48 en el Allianz Field luego de definir en el área tras una asistencia del español Jordi Alba.
El tanto de Messi, que este sábado no tenía a su lado a su socio Luis Suárez por motivos personales, colocó el 2-1 transitorio, pero las numerosas concesiones defensivas del Inter le terminaron costando su cuarta derrota en los últimos cinco partidos.
«Es una derrota dura para nosotros», reconoció el entrenador argentino Javier Mascherano. «Sabíamos que Minnesota nos podía hacer daño en transiciones y en pelota parada, y así lo hicieron. Eso es lo que más me preocupa», añadió.
Ante la ausencia del uruguayo Suárez, Mascherano presentó una oncena de marcado carácter defensivo para blindarse ante el Minnesota United, segundo de la Conferencia Oeste.
Mascherano se decantó por reforzar el centro del campo con el argentino Federico Redondo y reubicar a Messi como falso nueve.
De esta forma, el astro argentino tuvo todavía más encima a la zaga central de Minnesota y contó con menos opciones para combinar en un duelo en el que el Inter tuvo el 67% de la posesión de balón.
Javier Mascherano tras la derrota del Inter Miami: «La responsabilidad es toda mía»
A pesar de todas las precauciones, la zaga del Inter Miami hizo agua con numerosas concesiones que facilitaron la goleada local.
El sudafricano Bongokuhle Hlongwane abrió el marcador al aprovechar un pase filtrado del panameño Carlos Harvey, tras una larga acción ofensiva de Minnesota en la que el argentino Joaquín Pereyra eludió a cuatro defensores en la banda derecha.
El segundo tanto hizo todavía más daño al equipo de Mascherano al llegar a segundos del descanso. Michael Boxall colgó la pelota en el área visitante con un potente saque de banda que el argentino Nicolás Romero peinó al segundo palo para que el estadounidense Anthony Markanich anotara también de cabeza.
Nada más reanudarse el juego, Messi devolvió la esperanza al Inter al recortar la distancia en una de sus características combinaciones con Jordi Alba, en la que se acomodó la pelota con un gran control y lanzó un zurdazo cruzado a la red.
Pero el Inter volvió a dispararse al pie en otra acción a balón parado. El canadiense Tani Oluwaseyi peinó un saque de esquina y el defensa argentino Marcelo Weigandt marcó de cabeza en su propio arco.
Dos minutos después, el finlandés Robin Lod dio la puntilla en un contragolpe culminado con un sutil y ajustado remate desde el balcón del área.
Desde su llegada a Miami a mediados de 2023, Messi no había encajado un derrota tan abultada en la MLS.
«El equipo lo intentó por momentos pero pagamos muy caro varias desatenciones, ante un equipo que tiene tanto gol como Minnesota», lamentó Mascherano.
«Terminas perdiendo 4-1 y creo que no es la diferencia que hubo del partido», agregó ‘El Jefecito’, que se atribuyó la responsabilidad del reciente bajón de su equipo.
«Si los jugadores bajan el rendimiento, la responsabilidad es toda mía», subrayó.
Cuarto en el Este con 21 puntos, el Inter suma dos victorias en sus últimas seis jornadas en la MLS y la preocupación crece a su alrededor a cinco semanas de que inaugure el Mundial de Clubes de la FIFA ante el egipcio Al-Ahly en Miami.
El balance del equipo de Messi es de cuatro derrotas en sus últimos cinco partidos si se cuenta su participación en la Copa de Campeones de la Concacaf, en la que fue eliminado la semana pasada en semifinales por el Vancouver Whitecaps.
Con información de AFP.