En 2004, Mel Gibson estrenó su película más controversial. Para La pasión de Cristo, una historia sobre los últimos días de Jesús, el director neoyorquino recurrió al realismo extremo. Hizo un ejercicio de contrastes que espantó a los más sensibles: ¿qué saldría si mostraba al relato bíblico según su visión y con muchos, pero muchos litros de sangre?
A la violencia explícita de la película se le sumó una acusación colectiva de antisemitismo contra Gibson. El público se polarizó y una de las mitades denunció que supuestamente reforzó la narrativa de que los judíos tienen la culpa de la muerte del profeta. Un estereotipo antisemita utilizado para justificar el odio hacia los judíos.
En 2014, el medio católico National Catholic Reporter hizo una encuesta para conocer la imagen visual predominante que la gente imagina al recordar la película. Uno de los encuestados la describió como un film “sumamente ofensivo”, que “presentó a los líderes judíos como una mafia desalmada, a los apóstoles y a Jesús como ajenos a la vida religiosa judía, y al pueblo judío como unánimemente comprometido con la tortura y el asesinato de Jesús”.
Ese medio también destaca que Gibson reforzó los estereotipos de los judíos y tomó la decisión “consciente” de rechazar y negar el judaísmo: “‘Jesús de Nazaret, Rey de los Judíos’ está escrito únicamente en latín y arameo eclesiásticos. Rechaza el griego, como se detalla en Juan 19:20, y el griego era el idioma común del Imperio Romano en aquella época”.
Por qué La resurrección de Cristo hará polémica
Si todo marcha según la Biblia y el código de La pasión de Cristo, Gibson no eludirá a estas polémicas.

Mostrará en la secuela cómo Cristo apareció resucitado ante varias personas, entre ellos María y sus discípulos, y les enseñó sobre el reino de Dios.
También debería verse de qué manera ascendió a los cielos. En Hechos 1:9 se lee: “Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y le recibió una nube que le ocultó de sus ojos”.
Si en la anterior Gibson apostó al realismo extremo, ¿qué posición tomará con el ascenso de Jesús a los cielos? Sea cual sea la decisión volverá a traer sobre la mesa las mismas discusiones que genera la religión en sí.
A su vez, se tendrá en cuenta la postura del realizador respecto de los apóstoles, así como también de judíos y romanos, que nuevamente volverán a ser puestos en tema de juicio. Aunque no habrá tanta sangre como en la primera, estos temas seguirán vigentes.
La secuela de La pasión confirma su título
Gibson confirmó que la secuela de La pasión de Cristo se llamará La resurrección de Cristo y que la producirá con los estudios Lionsgate Motion Picture Group, con quien realizó sus últimas dos películas.
“Para muchísimas personas en todo el mundo, La resurrección de Cristo es el evento cinematográfico más esperado en una generación. Además, es una película impresionante y espectacularmente épica que dejará atónitos a los espectadores de todo el mundo”, declaró Adam Fogelson, presidente de Lionsgate.
Y agregó: “Mel es uno de los mejores directores de nuestro tiempo, y este proyecto es a la vez profundamente personal para él y la muestra perfecta de su talento como cineasta. Mi relación con Mel y Bruce se remonta a 30 años, y estoy encantado de colaborar con ellos una vez más en este evento emblemático para el público”.
La película comenzará a ser filmada en agosto en los estudios Cinecittà de Roma, anunció la directora general Manuela Cacciamani. El nuevo y extenso Estudio 22 de Cinecittà será el centro principal de la película.