
Arenys de Mar
Todos los partidos políticos representados en el Parlament de Catalunya, con la única excepción del partido del gobierno, el PSC, votaron a favor de la propuesta de resolución presentada por Junts per Catalunya en la Comissió de Territori, para reclamar, aparte de Rodalies, la mejora del transporte público, desde Arenys de Mar, lo que supondría una línea de autobús hasta Barcelona y la conexión con el hospital de Can Ruti.
La diputada Judit Toronjo, de acuerdo con el resto de partidos en la oposición, considera que el servicio que ahora ofrece Renfe en el Maresme es deficitario, por lo que subraya la necesidad de reforzar la oferta con una nueva línea de bus interurbano exprés con más frecuencias horarias, especialmente en hora punta.
Una petición que surge directamente del territorio, en concreto de la alcaldía de Arenys de Mar, donde Estanis Fors, el primer edil, impulsó al arco parlamentario la reclamación, a través de su partido. Fors, ahora muestra su satisfacción por poder iniciar la reivindicación y desea que todos los partidos, incluido el PSC, actúen con responsabilidad y empatía hacia el territorio.
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Fede Cedó

El partido del gobierno catalán se opuso a la propuesta aduciendo que hay otros municipios con el transporte público más deficitario que Arenys de Mar, que ya cuenta con la línea 1 de Rodalies, un argumento recurrente que han utilizado siempre para rechazar cualquier alternativa al servicio ferroviario, ignorando incluso las 5.000 firmas recogidas por vecinos para reclamar un servicio directo hasta el hospital Germans Trias i Pujol de Badalona, el centro de referencia en el Maresme.
La propuesta aprobada por el Parlament insta al gobierno a disponer de una línea operativa a mediados de este año. Será la Generalitat quien deberá decidir si hace suya dicha proposición o impondrá su negativa.
Obligados a parar en Mataró
El municipio de Arenys de Mar, a 40 km de la capital del país, sólo dispone de un único servicio de transporte público para realizar el desplazamiento entre ambas ciudades, la línea R1 de Cercanías-Renfe. “Teniendo en cuenta esta limitación y el servicio deficitario crónico de las cercanías operadas por Renfe, el vehículo privado acaba siendo una imposición más que una opción para escoger cómo hacer los desplazamientos” ha dicho la diputada.
Desde Junts se considera que Arenys de Mar necesita reforzar su oferta de transporte público porque son mayoritariamente desplazamientos de carácter imprescindible, es decir, para ir a trabajar o estudiar. Una situación que obliga a estos usuarios que no optan por el tren para sus traslados, a desplazarse hasta la capital de la comarca, Mataró, para poder disponer de autobuses hasta la universidad o la capital catalana.