Miguel Almirón es otro de los que aguantó los malos momentos de la Selección Paraguaya, le puso el pecho a todos los dedos acusadores y dejó pasar todas las faltas respeto para poder disfrutar de este gran presente de la Albirroja, que se colocó a puertas del Mundial 2026 tras derrotar a Uruguay el jueves en el Defensores del Chaco por las Eliminatorias Sudamericanas.
«Miggy», quien se mostró muy emotivo luego de la victoria frente a la «Celeste», dejó un mensaje en sus redes sociales para agradecer a la afición y destacar que el proyecto guaraní está cada vez mejor encaminado.
«Victoria importante para estar cada vez más cerca de nuestro objetivo. Muchas gracias a todos por el apoyo de siempre. ¡Vamos, Albirroja!», mencionó el mediocampista que milita actualmente en el Atlanta United de la MLS.
Miguel Almirón registra 13 partidos disputados en el camino hacia el Mundial Norteamérica 2026, fue titular todas las veces y lleva un gol anotado.
Dejanos tus comentarios en Voiz
Lo que no tiene de tamaño, Andrés Cubas lo tiene en coraje, valentía, amor propio y un despliegue interminable. Fue un partido más en el que el “motocito” rindió homenaje al ADN histórico de Paraguay.
En el banco la Albirroja tenía al cazador de utopías, y dentro del campo tuvo al cazador de pelotas imposibles: Andrés Cubas, que una vez más se “comió” el mediocampo del Defensores del Chaco, arrolló con De Arrascaeta, lo anestesió a Araújo y siguió corriendo hasta el último segundo, cuando el resto ya se arrastraba prácticamente.
Tremenda fue la nueva exhibición del mejor futbolista de la era Alfaro: ganó 9 de 11 duelos por abajo, triunfó hasta dos duelos por arriba con su 1, 63 m, estuvo imepcable en 7 entradas y cometió una sola falta en todo el partido.
Claramente en la era Gustavo Alfaro, el hombre del Vancouver Whitecaps se ha convertido en el mejor jugador de la selección paraguaya, que está a nada de volver a una ansiada Copa del Mundo.
Dejanos tus comentarios en Voiz
¿Quién más sino es él? El nuevo Julio Enciso, el dueño absoluto de la magia en Paraguay, el chico maravilla que se carga en sus hombros la ilusión de todo un país.
Enciso vivió y gozó la noche más soñada de su carrera como jugador: hizo un partidazo, participó del primer gol, hizo absolutamente todo el para el segundo y se fue ovacionado por un Defensores del Chaco que explotó de emoción y le regaló una caricia al corazón.
Está a nada de cumplir el sueño más sagrado de su abuelo: jugar una Copa del Mundo y estamos seguros que desde arriba, él está sonriendo de orgullo, sabiendo que Julio está escribiendo página a página la nueva historia de la selección paraguaya.
El fútbol es increíble: los reclamos, los insultos y el rechazo ahora fueron canjeados por halagos, dedicatorias y una aceptación total como nuevo ídolo, firmando el acta de jugador distinto, que nos ilusiona hacia una nueva Copa del Mundo.
Las lágrimas que antes eran de frustración ahora son de felicidad y el fútbol termina siendo tan justo a veces, que premia al valiente, al que insiste y no desiste.
Dejanos tus comentarios en Voiz