Redacción El País.
El periodista Alejo Piazza, de 28 años, dejó de salir al aire en Canal 5, donde era parte desde los comienzos del magazine vespertino El living. En la actualidad sigue vinculado al canal del Estado en la producción de Cinco sentidos, que va por las mañanas. Su salida se inscribió en el marco de la nueva política que impide la doble pantalla para los comunicadores en cuanto Piazza integra también el staff de Telenoche. “Me siento periodista antes que nada”, asegura el comunicador.
-Formaste parte de El Living desde sus comienzos y en las últimas semanas te despediste del aire, ¿cómo se procesó tu salida?
-Sí, estoy desde el comienzo cuando iniciamos el proyecto con Paula (Echevarría) y Rosario Collazo. Luego el programa fue variando y yo me mantuve hasta la despedida de los otros días. Las nuevas llegaron con su postura de evitar la doble pantalla y como estoy trabajando también en Telenoche, se tomó esta decisión. Sigo en el Canal 5 pero en labores de producción para el magazine de la mañana.
-Así que quedaste en situación de optar por El Living o Telenoche…
-En realidad ni siquiera me dieron a elegir. Me plantearon la posibilidad de hacer producción durante la tarde para el programa de la mañana y a mí me pareció como la mejor de las opciones para no generar un incumplimiento de contrato y un futuro problema con la situación que se había generado. Tuvimos un conflicto por algunas decisiones que se tomaron e incluso mi caso fue de los últimos en resolverse en cuanto a los comunicadores con doble pantalla. No es que tuve la opción de elegir entre un canal u otro, me informaron que estaba esa posibilidad y a mí me pareció que estaba bueno para continuar hasta diciembre, que finaliza contrato y eventualmente me plantearon la negociación de una posible renovación. No lo descartaron y en esos términos quedé y arranqué en este nuevo proyecto de Cinco sentidos.
-¿Qué te generó un poco la salida de El living?
-A nivel personal, mucha tristeza, porque implicó no solamente salir del aire y el contacto con el televidente, sino también un alejamiento del equipo que habíamos formado. Ahora sigo en el canal, en el mismo horario, pero ya no estoy vinculado al proyecto lo que me genera una sensación extraña. Más allá de que la salida fue en buenos términos, me genera mucha lástima. Hoy el programa tiene otro perfil, más allá de que mantiene la actualidad con Paula.
-El día de la despedida hubo un pronunciamiento muy fuerte de la audiencia…
-Sí, creo que el televidente se expresó muchísimo a través de las redes sociales ese día. Los comentarios hablan por sí solos, no tengo mucho que agregar, más allá de que coincido con gran parte de los comentarios.
-¿En Telenoche cuál es tu función?
-Comencé a hacer suplencias y así arranqué los fines de semanas. Luego quedé fijo, algunas veces en producción, otras con móviles y de todo tipo. Es una tarea me gusta mucho. Me considero periodista antes que nada. Trabajé en Montevideo Portal y en Radio Carve con Daniel Castro así que desde siempre estuve vinculado al periodismo de actualidad. Lo del Living fue un tremendo proyecto porque me sacó un poco de mi zona de confort, vinculado a cuestiones más culturales y eso me abrió mucho el bagaje periodístico. Fue un lindo complemento pero cuando apareció el proyecto de Telenoche, un informativo en un canal privado, para mí fue un antes y un después, una oportunidad que no podía dejar pasar.
-¿Qué área de información te gusta más?
-Me gusta más la parte política, pero disfruto de todo. Los fines de semana me toca cubrir todo tipo de cosas, desde eventos sociales o culturales. Como decía, siento que el periodismo es lo mío. Es una actividad que puedo hacer por muchas horas seguidas sin que me pese mayormente.
Foto: Ignacio Sánchez.
-¿Desde cuándo sentís que tenés esa inclinación por el periodismo?
-A los 19 años empecé en Radio Carve y luego pasé a Montevideo Portal. Ahí le fui tomando el gusto y me enganché. Hoy no me imagino haciendo otra cosa. El medio televisivo en concreto es difícil y exigente pero es también el lugar en donde siempre quise estar. Lo anterior lo tomo como parte de trayectoria para llegar de la mejor forma a este medio. Hoy trabajo en dos canales de televisión, lo cual me fascina. Me encanta el ambiente periodístico e incluso las esperas en la calle por una nota. Me fascina ver el back de todo, estoy como niño chico vivenciando las cosas que pasan en el país.
-¿Te ha pasado tener alguna situación incómoda en vivo en alguna cobertura?
-No, simplemente las típicas cosas que le pasan a todos, nada fuera de lo común. Obviamente, cada una de las personas tiene intereses en juego y es importante también entenderlo, reconocerlo y saber que nuestro trabajo periodístico es corroborar y saber por dónde viene ese interés. Entiendo también la postura de cada uno de los políticos cuando les molesta que hagas una pregunta. Hoy el sistema político está bastante polarizado entre el bloque coalición y el bloque Frente Amplio y es importante que los periodistas lo tengamos en cuenta. En mi caso, no me veo representado por ninguno de los dos bloques así que no me cuesta nada ponerme en un lugar imparcial.
-En tu caso es la primera vez, pero ¿cómo se viven los cambios de administración en la interna de Canal 5?
-Este en particular tuvo momentos de mucha tensión. Conversando con funcionarios que han vivido otros procesos similares, me han dicho que hubo cambios parecidos. En mi caso, desde lo personal, lo viví con gran incertidumbre. Al haber sido convocado por la dirección anterior, a cargo de Gerardo Sotelo, sabía que podía estar bajo la lupa más allá de que soy un profesional imparcial y tampoco que me veo representado por la gestión anterior. Yo hago mi trabajo. Soy un periodista independiente y así no me gustaría tener ningún tipo de señalamiento solo porque me contrató una dirección anterior. No quiero estar identificado con ninguno de los bloques y de hecho, me preocuparía que alguien me encasille. La conversación con las nuevas autoridades, igualmente, me dejo más tranquilo porque nunca me hablaron de esto ni de condiciones profesionales, sino que el problema era la doble pantalla. Además, Leonardo Luzzi fue mi jefe en Monte Carlo, por lo que también viví muy de cerca ese proceso. Así que fueron momentos tensos, pero por suerte ya pasaron y creo que ahora se está acomodando todo.
