El sindicato de empleados municipales de Bariloche, Soyem, torció el brazo al intendente Walter Cortés y logró hoy alcanzar un acuerdo con su premisa para que los aumentos salariales se midan con el IPC de la Patagonia y no con el indicador nacional como pretendía el Ejecutivo.
Soyem tenía en marcha un plan de lucha y este miércoles y jueves se preparaba para dos jornadas de retención de servicios en todas las áreas, pero finalmente esta tarde se informó el acuerdo en el contexto de la paritaria y se levantaron las medidas de fuerza.
Según indicó el gremio, el acuerdo es extensivo hasta junio y mantendrá la propuesta del Ejecutivo de otorgar subas mensuales en base al IPC pero no será el indicador promedio nacional que impulsaba el intendente Cortés sino el patagónico «reflejando de manera más justa el costo de vida en nuestra región», señaló el gremio.
«Este mecanismo de ajuste mensual garantiza una mejora salarial constante y protege el poder adquisitivo de los trabajadores al ser de carácter acumulativo y remunerativo», indicaron.
Queda pendiente la resolución de la quita de licencias gremiales con goce haberes a los integrantes de la conducción de Soyem, que aplicó el Ejecutivo a principios de mes de manera sorpresiva y cuya resolución está en manos de la Justicia. En ese ámbito está prevista una audiencia el 13 de marzo.
La retención del pago de haberes por la baja de las licencias gremiales afectó a 14 dirigentes de la comisión directiva, según denunciaron desde el gremio semanas atrás.
Cortés decidió dar de baja las licencias gremiales pagas alegando normativa en ese sentido en diversos ámbitos sindicales, sin embargo desde el Soyem señalan que es «ilegal» y que están amparados por la normativa específica que rige para el ámbito estatales.