El encuentro en el Coloso Marcelo Bielsa entre Newell’s y Boca comenzó con un hecho de violencia que increíblemente fue minimizado por las autoridades arbitrales y también del arquero xeneize Leandro Brey, quien mientras realizaba la entrada en calor fue alcanzado por un pedazo de vidrio que le tiraron desde la popular local y que le produjo un corte en la zona derecha del cuello. Después varias proyectiles le tiraron a Agustín Marchesín antes del pitado inicial.
El arquero, que ocupó el banco de suplentes ya que el titular es Agustín Marchesín, se quedó un rato con el proyectil en su mano mientras intentaba seguir con los ejercicios precompetitivos. Enseguida se acercaron desde el cuerpo médico de Boca, revisaron la lastimadura, y todo siguió como si nada.
— Boca Juniors – La12Tuittera (@la12tuittera) March 30, 2025
Sin embargo, justo antes de empezar el encuentro, cuando Marchesín se acercó al arco, le tiraron una lata. El arquero fue a hablar con el árbitro Dario Herrera, quien enseguida llamó a los encargados de seguridad. Cuando parecía calmado el tema, el ex Lanús regresó hacia el arco y nuevamente cayeron un par de latitas, de las que se utilizan para hacer bengalas de humo.
El gesto de incredulidad del técnico Fernando Gago cuando otra vez caían latas en el área mientras se acercaba Marchesín fue elocuente. Hubo otra vez una pequeña reunión entre las autoridades, incluidas las de la Liga, y tras otros minutos de demora, el juego pudo comenzar. En la última llegada a su área, Marchesín levantó los pulgares hacia la gente en gesto de amistad y para que se terminen las agresiones.
