Hoy Agustina Córdova fue mamá de su segunda hija: se llama Luz y nació en el sanatorio Otamendi. «Mi parto soñado», escribió la modelo en su cuenta de Instagram y luego agregó: «Parto vaginal, respetado, sin anestesia y en en el agua. Gracias #abrazonatal por el acompañamiento y la contención».
«Gracias Juan Pablo Sojo por traer a Andes a este mundo y ahora a Luz, por tu calidad humana sobre todo por darme palabras de aliento aún cuando ni yo lo podía creer. Al mejor papi del mundo, Tomas Arizaga, por tus chistes sin fin y sostén. Te amo. DAR A LUZ», concluyó su mensaje Agustina a pocas de horas del nacimiento de su pequeña hija.
Agustina es también mamá de Andes -de 4 años, hijo de su pareja anterior- y, entrevistada por revista Hola en diciembre del año pasado, contó que este embarazo lo estaba viviendo muy distinto al anterior. «En este embarazo se me activó más la femineidad, creo que debe ser porque estoy esperando una mujer. Si bien cuando acabás de parir te volvés muy lunar porque tu energía está enfocada en cuidar a tu bebé, con el tiempo empieza a aparecer Venus y ahí se despierta tu energía más femenina. Hay momentos en que estoy bien, tranquila, y otros en los que me siento una mujer cósmica, mucho más luminosa, energética», contó durante la entrevista.
Agustina es astróloga por eso explicó: «Al igual que Andes, Luz va a ser acuariana. Yo tengo ascendente en Acuario, así que hay algo ahí que tengo que aprender en esta vida y que me lo van a enseñar mis hijos», dijo.
La historia de amor de Agustina Córdova y
La modelo y el empresario gastrónimo se conocieron en Punta del Este hace dos años, fue en una salida con amigos. Ella estaba recién separada e intentando organizar su vida laboral con la maternidad e «intentando ser feliz», según sus propias palabras.
Con Tomás todo comenzó como una amistad y, al poco tiempo, volvieron a cruzarse en Mendoza. «Ahi si, nos decidimos a empezar a salir».
«Nos abrazamos y ese instante fue casi místico. Me acuerdo que pensé: “No tengo idea de qué va a pasar con este pibe, pero algo me vibró en este encuentro”. Fue un abrazo que dos años después me dejó esta hermosa familia. Me gusta pensar que esto también es la vida, que te sucede sin querer queriendo», explicó la modelo en el reportaje que le dio a la revista Hola.
