El Juez Marcelo Gradín sabe que hablar de poder no significa, necesariamente, ingresar en la brea partidaria. Reconoce los alcances de una declaración en un contexto en el que los que más debieran hablar ni siquiera cuelgan un posteo. En la segunda parte de la entrevista que concedió a Desalambrar abre el debate acerca del sistema judicial bonaerense y su colapso.
Pedagógicamente explica el alcance que ha tenido la herramienta virtual en un engranaje que cumple casi medio siglo. Los juicios no se aceleran con el instrumento tecnológico, el sistema no responde a la demanda de justicia.
Ensaya una propuesta que no requiere de presupuesto para frenar la disolución institucional: «Si cada uno hiciera lo que le corresponde esto se ordenaría, me refiero a que cada poder haga lo que debe hacer».
Gradín, que conoce perfectamente el territorio y describe con altura las últimas conquistas del Departamento Judicial Moreno – General Rodríguez, más fiscalías y Cámaras. NO necesita invitación para expresar sus críticas constructivas: «Soñaba con un Colegio mucho más comprometido, más cercano, con consultorios jurídicos gratuitos que es lo que necesita Moreno, en la pandemia funcionó con un mail, y eso es no entender la realidad. Los colegios además de tener sus funciones de la matrícula tiene cuestiones académicas para ofrecer a sus matriculados /as. Mirá, es muy difícil llegar de la matrícula a la adjudicatura, y lo que veo es que el Colegio de Abogados de Moreno no hace nada por eso, sus colegiados están muy lejos de llegar a ser jueces. Lo que veo como endogámico, cada vez más metido hacia si mismo, que no logra posicionar a los matriculados en ningún lado, que no es una voz activa dentro de las fuerzas vivas. No sé que opinión tiene sobre la designación por decreto de los jueces de la Corte, y me extraña que no sea el primero que opine«.
Entrevista completa en Desalambrar Tv: