Días atrás Diario San Rafael daba cuenta de la frágil situación de las industrias conserveras locales, y una de las cuestiones que se están dando en estos momentos tiene que ver con la producción de tomate.
La situación se hace “insostenible” principalmente por la importación. La pasta llega de China y Chile, mientras que hasta está ingresando tomate fresco desde Paraguay.
A todo esto hay que sumarle que los costos de producción son cada vez más altos por los incrementos en fertilizantes y energía.
El sector se muestra en estado de “alerta” ya que son miles de puestos de trabajo afectando fábricas en San Rafael, Valle de Uco, Gran Mendoza y San Juan.

No solo los trabajadores de la industria, sino también que los productores tienen en riesgo miles hectáreas cultivadas.
La “avalancha” de importaciones son un peligro para todo Cuyo, ya que se trata de una producción muy importante en la región.
La paradoja que plantean desde el segmento es que durante la última temporada Argentina estuvo cerca de lograr el “autoabastecimiento” y ahora ingresan millones de kilos con importación masiva.

El gran pedido de la industria es aplicar medidas que frenen la “competencia desleal” especialmente de la pasta china.
Tanto los industriales como los productores hicieron un llamado de “auxilio” a las autoridades nacionales.
La industria tomatera enfrenta una de sus peores crisis y el tiempo para tomar medidas se agota. Los productores siguen luchando por mantener sus cultivos y puestos de trabajo, mientras el sector demanda respuestas urgentes para evitar un colapso que impactaría a toda la economía regional.