Asunción, 20 mar (EFE).- El seleccionador de Paraguay, el argentino Gustavo Alfaro, afirmó este jueves que la Albirroja aún «está con un pie afuera» del Mundial 2026, luego de vencer en Asunción por 1-0 a Chile por las eliminatorias sudamericanas, al asegurar que dieron «un paso gigante», pero no uno «decisivo» para clasificar.
«El lugar común es decir que Paraguay está con un pie adentro de la Copa del mundo. No les voy a tirar al titular de mañana. Yo digo: Paraguay está con un pie afuera en la Copa del Mundo. Entonces, con un pie no vamos a la Copa del Mundo, hay que ir con los dos pies», destacó el técnico en una conferencia de prensa.
El estratega indicó que su plantel dio «un paso gigante hoy, no un paso decisivo», por lo que se están preparando para un partido «tremendamente difícil» ante Colombia, que es su próximo rival por la decimocuarta fecha.
El argentino celebró que con «paciencia» vencieron a «un rival muy incómodo» como Chile, que les permitió acumular 20 puntos para seguir en la zona de clasificación al Mundial, pero ratificó que el resultado no basta.
«Cuando uno llega a 20 llega el número del respeto. Uno dice y ya que se caiga en esta instancia es difícil. Es el respeto. Ahora, si nosotros creemos que ya por eso llegamos, nos equivocamos», enfatizó.
Pese a que existe «la sensación» de que Paraguay está haciendo «bien las cosas», luego de los tres empates y cuatro victorias conquistadas durante su dirección técnica que empezó en agosto pasado, Alfaro consideró que la recta final de las eliminatorias sudamericanas es «un campeonato distinto».
En ese sentido, aseguró que la Albirroja mantendrá la humildad en medio de su auge.
«Estos son tiempos de ser humildes y sencillos. La única manera de que la cabeza no se vaya más allá de la altura de los hombros es tener los pies sobre la tierra y en estos tiempos es cuanto más humilde y más sencillo tenemos que ser», manifestó.
Alfaro refirió igualmente que tienen un «compromiso muy grande» para que «Paraguay vuelva a estar en el lugar donde merece estar y del cual nunca más va a tener que bajarse», que es jugar un Mundial luego de estar ausente desde 2010.
«Eso significa hoy para mí Paraguay: Un desafío de vida, una lucha, una conquista, una demostración de que, por más que las cosas parezcan imposibles, cuando uno está dispuesto a ofrecer el corazón, lo imposible se puede transformar en algo posible», afirmó. EFE
