Durante toda la noche, los servicios de emergencia tuvieron que trabajar para atender caídas de árboles, anegamientos y cortes en los servicios, por el fuerte temporal. La lluvia se extendió desde la tarde del sábado hasta bien entrada la madrugada del domingo, cuando se sumaron fuertes ráfagas de viento que provocaron la mayor parte de los daños.
Al momento no se informaron daños graves a ninguna vivienda ni evacuados.