El Gobierno nacional condenó con dureza al régimen de Nicolás Maduro por desapariciones forzadas y detenciones arbitrarias, y exigió la liberación del gendarme argentino Nahuel Gallo.
La República Argentina expresó este jueves su “más firme y categórica condena” al gobierno de Venezuela por lo que calificó como un “proceso sistemático de detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas y violaciones generalizadas de los derechos humanos”.
A través de un comunicado oficial, el Ejecutivo argentino manifestó su “profunda preocupación” por la detención arbitraria de ciudadanos argentinos en territorio venezolano, y exigió en particular la liberación inmediata del gendarme Nahuel Gallo, así como de “todos los connacionales que se encuentren ilegalmente privados de su libertad por dicho régimen”.
En el texto, el Gobierno apuntó directamente contra Diosdado Cabello, uno de los principales dirigentes del chavismo, a quien acusó de liderar una “maquinaria represiva” que utiliza el secuestro, el hostigamiento y la desaparición forzada como herramientas de persecución. “Se trata de un patrón de represión que puede ser calificado como terrorismo de Estado, por su carácter sistemático, intimidatorio y arbitrario”, señala el comunicado.
Además, Argentina adelantó que profundizará las denuncias internacionales ante la Corte Penal Internacional, no solo contra Cabello sino también contra otros funcionarios “responsables de este entramado”, a quienes acusa de cometer crímenes de lesa humanidad.
El Ejecutivo argentino también llamó a las “naciones democráticas” a “unir esfuerzos” para frenar la persecución impulsada desde el Estado venezolano y ratificó su compromiso con la defensa de los derechos humanos y las libertades fundamentales.
“Continuaremos impulsando todas las acciones necesarias para asegurar que estos crímenes no queden impunes y que todos sus responsables —materiales e intelectuales— enfrenten la justicia internacional con todo el peso de la ley”, concluye el documento oficial.