México es el segundo país de América Latina en formar parte del ranking, pero más abajo que Argentina. Entérate cuáles son los motivos.

Argentina, el más odiado: es el país con peor imagen en América Latina, por estas 3 razones
Argentina no deja de ser noticia en el mundo. Si no es por Messi, es por Colapinto y si no es por Colapinto es por Milei o por ser el país con peor imagen en América Latina. Sí, como leíste. Argentina se posiciona como el país más odiado según un informe.
Así como tenemos grandes referentes de la cultura, la música, el cine, la política y el deporte, Argentina logró posicionarse en el listado global de los 30 países con más valoraciones negativas.
El ranking fue elaborado por World Population Review, un sitio especializado en datos estadísticos globales, y posiciona a la Argentina en el puesto 24 convirtiéndola en la única nación sudamericana entre los 25 países más odiados y liderando la región. México también aparece en el listado, pero en el puesto 28.
Los motivos por los cuales Argentina es la más odiada
Aunque muchos critican a la Argentina, otros consumen su cultura y sienten una gran atracción por destacadas figuras como Messi, Colapinto, entre otros. Sin embargo, el ranking señala tres factores claves que convierten al país en el más odiado:
- Rivalidades deportivas.
- Vaivenes políticos.
- Percepción de superioridad cultural.
Al mismo tiempo, desde el informe se agrega que las crisis económicas, los cambios abruptos de modelos políticos y un fuerte protagonismo mediático son otros factores que la posicionan en el ranking.
Texto del párrafo.png
Ahora bien, en el top 3 mundial se encuentra China, Estados Unidos y Rusia. En el caso de China criticada por su autoritarismo y por ser el país que genera mayor contaminación a nivel global.
En tanto que Estados Unidos es señalado por su intervencionismo y la influencia que tiene en conflictos internacionales. Por su parte, Rusia ocupa el tercer lugar en el podio por su rol en la Guerra Fría, la actual guerra en Ucrania y las denuncias de injerencia electoral.