La tensión en Medio Oriente vuelve a encender alarmas en la Argentina. Este domingo, la Oficina del Presidente de la República Argentina (OPRA) emitió un fuerte comunicado condenando el ataque de Irán contra Israel y repudiando el nombramiento de Ahmad Vahidi —acusado por el atentado a la AMIA en 1994— como comandante interino de la Guardia Revolucionaria Islámica. En este contexto, el periodista argentino Gabriel Ben Tasgal, radicado en Israel, advirtió que la amenaza no es solo regional, sino que puede tener consecuencias en territorio argentino.
«Los iraníes tienen un patrón de conducta que se llama ‘atentado de repisa’: preparan un ataque, lo dejan dormido y lo activan cuando tienen la oportunidad», explicó Ben Tasgal en una entrevista radial. «Conociendo a los que se dedican a la seguridad en Argentina, estoy seguro de que ahora están preocupados y en alerta, porque una forma de actuar de los iraníes es hacer daño donde creen que la justicia no siempre funciona».
El comunicador, educador y director de Hatzad Hasheni, especializado en política israelí y Medio Oriente, remarcó que Israel permanece en alerta: «En principio estamos tranquilos, pero nos indican mantenernos cerca de un refugio antibombas. En octubre del año pasado dispararon 181 misiles balísticos. Fueron interceptados por el sistema Flecha 3, que evitó una tragedia».
De acuerdo a su explicación, el reciente ataque de Israel sobre infraestructura iraní tuvo como trasfondo una amenaza nuclear concreta: «Según datos de inteligencia, Irán está a punto de armar su primera bomba nuclear y tiene capacidad para fabricar hasta 15. Eso fue lo que precipitó el ataque. Estados Unidos colaboró con bombas específicas, logística e información sensible para concretarlo».
Para Ben Tasgal, Irán no es una potencia militar tradicional, sino un actor que recurre a sus «brazos armados» y a operaciones encubiertas. «Cuando no puede enfrentarse cara a cara, recurre a proxys o a acciones indirectas, como ocurrió en 1992«, fecha en la que la embajada de Israel en Argentina sufrió un atentado.
El Gobierno repudió a Irán por nombrar a un acusado del atentado a la AMIA
El comunicado oficial del gobierno argentino recordó que Vahidi, nombrado por Irán al frente de la Guardia Revolucionaria, está acusado de haber liderado la decisión política que derivó en el atentado de 1994, que dejó 85 muertos. «La memoria de nuestros asesinados exige que los responsables rindan cuentas, sin privilegios ni amparos internacionales», expresó la OPRA, al respaldar el pedido de juicio en ausencia.
Finalmente, Ben Tasgal vinculó el posicionamiento internacional del presidente Javier Milei con el riesgo potencial de represalias: «Milei se posiciona en América Latina como un gran portavoz de los países alineados al desarrollo, al éxito. Se alinea con Israel y Estados Unidos, y eso puede ser una especie de llamadera de atención para el régimen iraní».
Irán afirmó que no busca expandir el conflicto fuera de su territorio
Mientras crecen las advertencias por posibles represalias indirectas de Irán en América Latina, el gobierno de ese país aseguró públicamente que no busca expandir el conflicto a otros territorios. El canciller iraní Seyed Abbas Araghchi declaró que «la agresión nos fue impuesta» y que su país está actuando en defensa propia, sin intención de extender la guerra más allá de la región, informó el medio Noticias Argentinas.
A pesar de esta postura oficial, la escalada bélica dejó hasta el momento 244 muertos y más de 1.200 heridos en Irán, según autoridades locales, y se denuncian nuevos bombardeos israelíes sobre instalaciones estratégicas. En este contexto, Israel responsabilizó a Irán por los ataques masivos con misiles y drones, mientras que Teherán acusó a Estados Unidos de apoyar la ofensiva militar israelí.
