Hubo en tiempo, sobre todo en la etapa del alcalde Jordi Hereu, en el que inaugurar una escalera mecánica en los barrios más alpinos de Barcelona se convertía en una auténtica fiesta ciudadana. Ahora, cuando se hace referencia a este invento, la noticia suele centrarse más en el mantenimiento o la renovación de la infraestructura, como sucede, por ejemplo, con las escaleras que suben desde Maria Cristina hacia Montjuïc. La tendencia la romperá a lo grande Montbau (en el distrito de Horta-Guinardó), en concreto, la calle Poesia, donde el Ayuntamiento acaba de aprobar la instalación de la primera rampa mecánica peatonal.
Con esta novedosa actuación, que dispone de un presupuesto cercano a los siete millones de euros, “se dará solución a un problema de accesibilidad y movilidad en un tramo de calle que tiene una pendiente sostenida y bastante pronunciada, del 10%”. El proyecto incluye la renovación de la iluminación del entorno (futuras luces led) y la ampliación de las aceras existentes. Si nada lo evita, las obras deberían empezar en enero del 2026 para terminar, o esa es la previsión municipal, en un año y medio.
Las tres rampas quedarán instaladas en la banda Besòs de la calle Poesia, entre el paseo Vall d’Hebron y la calle Vayreda. Solo funcionarán de subida, con velocidades de 0,50 metros por segundo con pasajeros a bordo, o de 0,20 metros por segundo cuando vayan de vacío. Tendrán un metro de ancho y podrán transportar un máximo de 6.000 personas cada hora.
Por lo que respecta al estacionamiento de vehículos, se mantendrán las plazas actuales, es decir, 45 para coches y nueve para motocicletas. El proyecto permitirá también intervenir en un clásico del urbanismo barcelonés: la red de cloacas. Se aplicará chapa y pintura a un espacio de 5.700 metros cuadrados. Para que las cosas fluyan tanto en superficie como bajo tierra.