Una multitud celebró en el Centro Cívico la hazaña de 220 metros de chocolate artesanal. El evento central de la Fiesta del Chocolate convocó a vecinos, turistas y autoridades en una jornada inolvidable.
Bariloche volvió a hacer historia. Este viernes, en el marco de la Fiesta del Chocolate, la ciudad superó su propio récord mundial al presentar la barra de chocolate más larga del mundo, con una extensión de 220 metros. La actividad, que reunió a miles de personas en el Centro Cívico, se convirtió en el momento más esperado del evento y tuvo como protagonistas a los maestros chocolateros locales.
Desde temprano, vecinos y turistas se acercaron al corazón de la ciudad para presenciar la construcción en vivo de la inmensa barra artesanal, elaborada con chocolate de alta calidad. La jornada, acompañada por un clima ideal, se vivió con emoción, fotos, aplausos y degustaciones. Cada tramo de la barra fue repartido con generosidad entre los asistentes, en una postal que mezcló tradición, identidad y sabor.
La celebración contó con la participación del intendente Walter Cortés, acompañado por funcionarios nacionales, provinciales y municipales, entre ellos el secretario de Turismo, Ambiente y Deportes de la Nación, Daniel Scioli, y la senadora nacional Silvina García Larraburu. También asistieron los intendentes de localidades cercanas y representantes del Parque Nacional Nahuel Huapi.
Organizado por la Cámara de Chocolateros de Bariloche, el EMPROTUR y la Municipalidad, el evento fue conducido por Natalia Calderón y el “Indio” Marino, quienes animaron la jornada con entusiasmo. También estuvieron presentes la Reina Nacional de la Nieve, Juana Saporiti, y sus princesas, sumando color y alegría a la fiesta.
“Este tipo de iniciativas no solo llenan de alegría a nuestra comunidad, sino que también generan trabajo y posicionan a Bariloche como la capital nacional del chocolate”, expresó el intendente Cortés.
Una vez más, Bariloche demostró su liderazgo en la producción artesanal de chocolate y su capacidad de convocar a través de la tradición. Con récord incluido, la Fiesta del Chocolate volvió a dejar huella en los corazones… y los paladares.