Estos bastones de espinaca son livianos, fáciles de preparar y perfectos para acompañar ensaladas, guarniciones o servir en una picada saludable.

Imegan creada por Chat GPT
Redacción El País
Los bastones de espinaca son una opción versátil: se pueden presentar como entrada, en una picada con amigos o incluso como plato principal, acompañados de ensaladas o algún puré.
Aunque la receta clásica suele incluir fritura o harina, existe una alternativa más saludable que conserva el sabor y la textura: dorados por fuera y suaves por dentro, ideales para quienes buscan comer rico sin caer en excesos.
Ingredientes necesarios
- 1 atado grande de espinaca
- 2 huevos
- 1 taza de avena procesada
- 1 diente de ajo picado (opcional)
- 2 cucharadas de queso rallado (opcional)
- Sal, pimienta y nuez moscada a gusto
- Aceite en spray
Paso a paso de la preparación
Primero, lavá bien la espinaca, retirale los tallos más gruesos y cocinala al vapor por unos pocos minutos. Escurrila a fondo con un colador o un repasador limpio para sacar todo el líquido, y luego picala bien chica.
En un bowl mezclá la espinaca con los huevos, la avena, el ajo, el queso y los condimentos. La preparación debe quedar húmeda pero firme; si notás que se desarma, agregá un poco más de avena.
Con las manos apenas mojadas, formá bastoncitos y colocalos en una bandeja para horno previamente aceitada con spray. Cociná en horno precalentado a 200 °C durante 20 a 25 minutos, dándolos vuelta a mitad de cocción para que se doren de ambos lados.

Imagen creada por Chat GPT
Ideas para acompañar
Estos bastones se disfrutan mejor con guarniciones frescas o algún dip casero. Una ensalada de verdes con tomate, zanahoria rallada y un aderezo sencillo de limón y oliva siempre funciona bien. También podés optar por rodajas de tomate con orégano o algún b para sumar un toque ácido.
En cuanto a salsas, van de maravilla con una de yogur natural, limón y ciboulette, con la clásica mostaza y miel o incluso con una criolla liviana a base de tomate, cebolla y morrón.
Si preferís una opción más contundente, acompañalos con arroz, puré de papa o calabaza, o unas verduras grilladas. Y si la idea es armar un tapeo estilo español, se pueden servir con pan pita o focaccia, junto a untables o quesos cremosos para improvisar mini sándwiches.
¿Encontraste un error?
Reportar