El batido que combina avena y frutillas no es solo sabroso, sino que puede mejorar la digestión, reforzar las defensas del organismo y cuidar el corazón gracias a sus nutrientes esenciales.

Imagen creada por Chat GPT
Redacción El País
En épocas en que buscamos alternativas naturales para sentirnos mejor, el batido de avena con frutillas se perfila como una opción ideal: nutritivo, accesible y versátil.
Abajo detallamos sus propiedades más destacadas, cómo potenciar sus efectos y recomendaciones para consumirlo sin caer en excesos.
¿Qué aportan sus ingredientes?
Avena
- Es un cereal integral que aporta fibra soluble, como los beta-glucanos, los cuales ayudan a reducir los niveles de colesterol “malo” (LDL) y a moderar los picos de glucosa en sangre.
- Brinda sensación de saciedad, lo que puede colaborar a controlar el peso corporal cuando se la incorpora regularmente en la dieta.
- Favorece al tránsito intestinal, ayudando a prevenir el estreñimiento.
Frutillas
- Son ricas en vitamina C, antioxidantes como las antocianinas, y otros compuestos que combaten la inflamación y ayudan al sistema inmune.
- Su contenido de agua y bajo aporte calórico las convierte en frutas ideales para hidratarse y consumir sin agregar muchas calorías.
- La fibra presente en las frutillas mejora la digestión, ayuda a regular el tránsito intestinal y puede colaborar en la reducción del colesterol.
Beneficios al mezclar ambos en un batido
Cuando avena y frutillas se combinan se potencian efectos:
- Mejor salud cardiovascular: la avena actúa sobre el colesterol, las frutillas aportan antioxidantes que reducen la inflamación y el estrés oxidativo, lo que beneficia arterias y corazón.
- Control de glucemia y energía sostenible: la fibra de la avena enlentece la absorción de los azúcares, lo que ayuda a evitar subidas bruscas de azúcar; la frutilla aporta azúcares naturales menos concentrados.
- Refuerzo del sistema inmunológico: mayor aporte de vitaminas (especialmente C), minerales y antioxidantes.
- Salud digestiva: la combinación de fibras soluble e insoluble favorece un tránsito intestinal más regular.
- Hidratación y bienestar general: la frescura de la frutilla agregada al batido ayuda con la hidratación, ideal para comenzar el día o después de actividad física.

Foto: Pexels.
Cómo prepararlo bien
Para sacarle el máximo provecho, mirá estos consejos al momento de preparar el batido:
- Usá avena integral o copos gruesos, no avena instantánea ultrapulverizada ni avena con muchos aditivos.
- Optá por frutillas maduras, bien lavadas.
- Evitá añadir demasiados azúcares refinados; si querés endulzar, usá miel, estevia o sükrin, o elegí acompañamientos como banana madura.
- Incluir líquido saludable: agua, leche descremada, leche vegetal sin azúcar, yogur natural.
- Tomalo en el desayuno o a media mañana para aprovechar su efecto saciante. Evitá hacerlo muy tarde para no sobrecargar el sistema digestivo.
Advertencias y observaciones
Aunque los beneficios son notables, no es un remedio mágico. Debe integrarse dentro de una dieta equilibrada y un estilo de vida saludable que incluya ejercicio.
Personas con diabetes deben medir el total de carbohidratos del batido para ajustarlo a sus requerimientos.
Si existe alergia a alguno de los ingredientes, obviamente evitarlo.
Moderar las porciones: un exceso de avena o fruta puede aportar calorías que se suman al final del día.
¿Encontraste un error?
Reportar