Un abogado católico, atrapado entre el deseo y la culpa. Un personaje que huele a perfume caro, pero suda obsesión. Una historia que combina el mundo de los famosos, OnlyFans y el cine pop con delirio erótico. En Solo fanáticos, la nueva película de Leo Damario –que ya se encuentra en postproducción–, Benjamín Vicuña se lanza de cabeza a un rol incómodo, filoso, provocador. Y lo hace con una entrega absoluta.
En una entrevista íntima con GENTE en medio del rodaje de sus escenas –y a partir de imágenes exclusivas–, el actor chileno se abre sobre su vínculo con el cine independiente, el rol de las nuevas voces en la industria, su afinidad artística con Damario, y la importancia –política, vital, visceral– de contar historias distintas.
En Solo fanáticos, Vicuña interpreta a un abogado que se convierte en aliado –y juez– de una mujer que vive del deseo ajeno: una protagonista con cuenta en OnlyFans que incomoda a su entorno y busca justicia.
El personaje de Benjamín es su defensor frente a la familia de su ex, el hijo de un magnate hotelero con apellido de elite que se borra de la responsabilidad parental. Pero, al mismo tiempo, además de estar enamorado de ella, desde su conservadurismo se convierte su sombra más inquisidora ya que la juzga. Esa tensión lo llevó a explorar nuevos pliegues actorales.
–¿Cómo fue meterte en la piel de este abogado obsesionado con seducir a la protagonista (interpretada por China Kruger)?
–Solo fanáticos es un proyecto que me permitió explorar nuevos roles y desafíos. Aportarle a la historia otro tipo de hombre en este mundo hostil que atraviesa la protagonista fue un reto interesante. Con humor y hasta un poquito de perversión, es un personaje muy jugado.
–Leo Damario tiene una estética muy particular, entre lo erótico y lo pop. ¿Cómo fue trabajar bajo su dirección?
–Filmar con Leo siempre es una experiencia maravillosa. Hemos hecho juntos Victoria, psicóloga vengadora (Prime Video), con la cual tuve la nominación a los premios Produ y ganamos el Cóndor de Plata a la mejor serie. Es un placer trabajar con un director muy moderno, con el que siempre estamos pensando en hacer cosas más grandes. Me siento muy relajado con su estilo de dirección y tuvimos muy buena química en el set.
Es un director que siempre busca descubrir nuevas caras en el cine y apoyar a actores nuevos. Yo también apoyo a los actores nuevos, creo que es fundamental darle oportunidades a los talentos emergentes. En este proyecto, tuvimos el placer de trabajar con Antonella Kruger, quien estuvo acompañada por un elenco de lujo que incluye a Nacha Guevara, Rafael Spregelburd y Emilia Attias (entre otros).
–¿Cómo se dio la dinámica de trabajar con la protagonista de la peli?
–Anto brilla en la pantalla, dirigida por Leo, con quien forma una pareja artística y amorosa que se traduce en magia en la película. Juntos, crean una familia moderna que es un deleite de ver. La presencia de la hija de Leo en el set agrega un toque especial a la dinámica familiar que se refleja en la pantalla.
–¿Qué te dejó esta experiencia como actor?
–Me parece fundamental apoyar el cine independiente en Argentina, especialmente cuando se trata de historias contadas desde una perspectiva femenina. Creo que es hora de darle más espacio a las voces y visiones de las mujeres en la industria del cine.
Benjamín Vicuña y su visión sobre el cine argentino
En esta nueva aventura cinematográfica, Vicuña se calza un traje que no es sólo el del “abogado del deseo”, sino con el que asume el peso que implica apoyar el cine independiente local. En un presente saturado de algoritmos, con la financiación del cine en jaque y la cultura en tensión, se la juega por historias incómodas, nuevas voces y una estética vanguardista.
“Como artista, creo que lo importante es estar apoyando al cine y haciendo cine que refleje la diversidad y complejidad de la sociedad. Leo es un autor como Sean Baker en Hollywood, con una visión única y una capacidad para contar historias que inspiran y provocan”, cuenta Vicuña con una claridad que rebota como eco político. Y para cerrar, sostiene: “Estoy orgulloso de ser parte de este proyecto y de trabajar con Leo, que lleva la bandera del cine independiente con pasión y dedicación”.
A lo largo de su carrera, Vicuña ha ido alternando entre el mainstream y las propuestas no convencionales. Entre lo popular y lo personal. Y eso lo convierte en un puente distinto y valioso. Su próximo proyecto, a estrenarse el 2 de octubre, es Rey del Ring, que narra la vida de Arturo Godoy, un boxeador chileno que luchó contra Joe Louis en el Madison Square Garden.
