Mientras Martín Gonzalo Cáceres continúa internado en «situación delicada», tras recibir una brutal paliza a la salida de una fiesta que se desarrollaba en boliche en el barrio Chateau Carreras de Córdoba; la policía confirmó la detención de un ex jugador de rugby de 22 años a quien señalan de ser «el único autor de los golpes». Las cámaras de seguridad de la zona sirvieron para identificar al agresor.
La noticia no frenó el reclamo de la familia, que rechaza la versión policial y denuncia un ataque en patota: señalan a un grupo de rugbiers y exigen que se amplíe la investigación. Algo que por el momento, parece que no sucederá. La polémica quedó instalada.
“Todas las pruebas nos llevan a que ha sido uno solo el autor del hecho, aunque la investigación es incipiente”, anticipó en rueda de prensa desde la jefatura policial, el jefe de Homicidios, Claudio Bustamante.
El jefe policial confirmó que Agustín M., alias «El Chino» de 22 años fue identificado por las cámaras de seguridad de la zona como quien golpeó a Cáceres y lo dejó con serias lesiones en la cabeza, peleando por su vida en el Sanatorio Parque en San Vicente.
«Tengo entendido que el agresor estuvo vinculado al club Córdoba Athletic como jugador, pero que está alejado de la actividad -confirmó Bustamante-. Por lo pronto no tiene antecedentes penales«, informó. Y agregó que pudo ser identificado a partir de testimonios de testigos. «El sospechado fue detenido en su domicilio particular, contando con la colaboración de su familia», aclaró.

En todo momento, Bustamante habla de un «único agresor»; a pesar que desde el inicio del caso siempre se habló de un ataque en patota, que es lo que reclama la familia de la víctima. Por lo pronto, el ex rugbier quedó imputado por el delito de «lesiones graves».
El fiscal Horacio Vázquez está al frente de la investigación y ya ordenó revisar las cámaras de seguridad en la zona para intentar dar con los autores de la agresión.
Martín Cáceres recibió una paliza a la salida del boliche Kabana ubicado sobre avenida Cárcano al 1400, en la zona del barrio Chateau durante este domingo por la madrugada. Había ido al lugar con unos amigos.
“Martin fue con su amigo Alejo esa noche. Pero fuera del boliche hubo una discusión que rápidamente subió de tono. En un momento, se empezaron a empujar con un grupo de rugbiers y uno de ellos se agrandaba diciendo que eran 18”, contó Santiago Oliva, uno de los mejores amigos de la víctima.

En charla con Clarín, Oliva confirmó que este grupo «le agarró la gorra a Alejo y se la revolearon», y que eso empezó una pelea. «En ningún momento buscó pelea porque es una persona que nunca se peleó con nadie. Martín intentó frenar la pelea, y de costado le empezaron a pegar. Cayó al piso y le siguieron pegando de manera salvaje«, contó.
Tras la paliza, Cáceres alcanzó a llegar hasta la casa de un amigo en Villa Allende. Pero, producto de los golpes recibidos, a las pocas horas se descompensó y tuvo que ser internado de urgencia: fue intervenido quirúrgicamente debido a un traumatismo de cráneo con sangrado interno. Actualmente, se encuentra internado en terapia intensiva y su pronóstico sigue siendo reservado.
El reclamo de los familiares de Cáceres
«A Martín lo atacó un grupo de rugbiers. Esto es claro. No entendemos por qué la policía dice que hay un único agresor. Esta pelea arrancó dentro del lugar y siguió afuera. Hay testigos que afirman esto», remarcó Claudia Torres en cercanías del sanatorio donde está internado su sobrino, en charla con Radio Mitre.

«¿A quién se quiere cuidar?, ¿quién está implicado?, ¿por qué se intenta tapar esto?, son preguntas que nos hacemos los familiares y amigos de Martín. Exigimos que se amplíe la investigación y que busquen al resto de los implicados», sumó Carlos, otro de los parientes que permanece en el sanatorio Parque. Y pidió a los «testigos» que se acerquen a la comisaría para que «todos los culpables paguen».
Luego de la paliza recibida por Cáceres, el club de rugby Córdoba Athletic se desligó de la organización del evento y publicó un comunicado solidarizándose con el joven agredido: “Queremos principalmente extender nuestra solidaridad a Martín González Cáceres y a su familia, esperando logre una pronta recuperación”.
«El chico está en una situación delicada», anticipó Matías Díaz, jefe de Guardia del Sanatorio Parque. En charla con el diario La Voz, el médico confirmó que «se lo intervino quirúrgicamente», pero que su llegada fue «en estado neurológico crítico».
«Mostró una leve mejoría, pero no significa que pueda evolucionar. Tuvo un hematoma extradural, que se formó entre el hueso y una membrana que recubre el cerebro, que lo empuja y comprime. El riesgo continúa», detalló Díaz.
D.D.