Defensores de Cambaceres no pudo imponer condiciones en Ensenada y terminó igualando 1 a 1 con Atlas, en el partido de ida que definirá quién sigue en competencia. El Rojo deberá ir a General Rodríguez a buscar una victoria, en los 90 minutos o desde el punto penal, si quiere evitar quedarse sin actividad hasta la próxima temporada, un desafío mayúsculo en un año en el que ganar le ha costado demasiado.
El encuentro comenzó con intensidad y ocasiones en ambos arcos. Atlas avisó primero con un mano a mano que Collazo resolvió con solvencia, mientras que Camba encontró su mejor vía por la derecha, donde Tiziano García dispuso de dos chances claras para abrir el marcador. Sin embargo, el juego se fue apagando con el correr de los minutos y la lucha se trasladó al mediocampo.
Cuando parecía que el primer tiempo se iba sin goles, Franco Romero sorprendió con un derechazo cruzado desde media distancia que se incrustó en el ángulo superior derecho: un golazo para irse al descanso en ventaja. Pero la alegría duró poco. A los cinco minutos del complemento, una desatención defensiva permitió que Retamozo empatara el partido, golpe que Cambaceres sintió en el juego y en la confianza.
La visita se replegó cómoda con el resultado, mientras el Rojo se mostraba impreciso. Recién en el tramo final, con los cambios, que parecieron llegar tarde, el local volvió a generar peligro: Duarte remató apenas desviado y Lince ahogó el grito de Almirón.
El empate dejó la llave abierta y obliga a Cambaceres a un planteo inteligente en la revancha. Si quiere prolongar su temporada, deberá mostrar una cara más efectiva y dejar atrás las desconcentraciones que lo persiguen.