El texto actualiza las estrategias previas publicadas en 2008 y 2016 e inaugura una «nueva era» basada en cinco programas clave anunciados por Xi Jinping: solidaridad, desarrollo compartido, civilización, paz y conectividad humana.
La nueva doctrina promete ayuda e inversión «sin condiciones políticas», presentándose como una alternativa pragmática al modelo occidental.
China también está cambiando el enfoque de la cooperación, pasando de la simple extracción de recursos a sectores de alto valor añadido: economía digital, aeroespacial, infraestructura inteligente y energía verde.
Al alinearse con la Iniciativa de la Franja y la Ruta, el país aspira a construir una «comunidad de futuro compartido», consolidando su liderazgo y desafiando la influencia tradicional de Estados Unidos en la región. (ANSA).

