Las provincias de Río Negro, Neuquén y Chubut sellaron una alianza estratégica para coordinar un operativo de defensa contra incendios forestales.
La iniciativa, centrada en el despliegue de un poderoso frente aéreo, busca evitar que se repitan tragedias como la de Mallín Ahogado.
Un operativo aéreo conjunto para la temporada crítica
El núcleo del acuerdo interprovincial consiste en el alquiler conjunto de aeronaves de gran capacidad. El plan operativo incluye la contratación de un avión y dos helicópteros pesados, con capacidad de descarga de hasta 4.000 litros de agua o retardante cada uno. Según información de la fuente oficial, estas aeronaves estarán operativas durante los meses de mayor peligro, de diciembre a marzo, listas para actuar en cualquier punto de la región.
La experiencia pasada como motor de la prevención
La decisión no es arbitraria; surge de la experiencia traumática de incendios recientes. Orlando Báez, jefe del Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (SPLIF) de Bariloche, advirtió: “El antecedente de Mallín Ahogado está muy presente”. En ese incidente, el fuego consumió una hectárea en cuestión de minutos, un hecho que encendió todas las alarmas sobre la necesidad de estar mejor preparados.
Cooperación terrestre y refuerzo de brigadistas
Más allá de la flota aérea, la estrategia se completa con un fuerte componente terrestre y de coordinación humana. Las provincias trabajarán en estrecha colaboración para unificar protocolos. Paralelamente, se ha procedido a un significativo refuerzo del equipamiento, con la incorporación de nuevos vehículos y 51 contrataciones de brigadistas para las bases de El Bolsón y Bariloche.
Con los trámites administrativos en su fase final, la Patagonia se prepara para enfrentar el verano con una postura ofensiva y unificada. Esta acción conjunta marca un precedente en la gestión regional de riesgos y demuestra un firme compromiso por proteger el valioso patrimonio natural y las comunidades de la región. Información extraída del medio La17.