La imagen, difundida una y otra vez por las revistas del corazón, el cine y las series muestra a los millonarios dándose la buena vida. Es decir, vistiendo ropas caras, cenando en restaurantes de lujo, viajando en jets privados o luciendo relojes que pueden valer miles de dólares. Un estilo de vida que, sin embargo, esconde secretos.
Varias investigaciones, como encuestas a gente adinerada, revelan que, en realidad, los millonarios viven de manera mucho más discreta, evitan el despilfarro porque cuidan su dinero y pasan bastante tiempo leyendo o haciendo ejercicio, en lugar de ir a eventos.
Los hábitos de los millonarios, por cierto, han sorprendido a los investigadores que destacan que, en su mayoría, tienen una actitud optimista ante los desafíos de la vida, quizá, porque “tienen muchos problemas resueltos” gracias a su dinero.
Para conocer cómo viven los millonarios, el planificador financiero Tom Corley realizó el estudio Rich Habits que abarcó a 233 personas con un patrimonio medio de US$ 4,3 millones. Sus conclusiones dan varias pistas sobre el estilo de vida y los secretos de la gente adinerada.

Corley aclara que el 76% de los entrevistados se había construido a sí mismos (el famoso sueño americano) y que el resto había heredado su riqueza. Destaca la accesibilidad de sus hábitos que podrían ser imitados por quienes aspiran a convertirse en millonarios.
1) Se toman su tiempo. Los millonarios se pueden dividir en cuatro categorías en cuanto a su gestión financiera: ahorradores-inversores, grandes emprendedores, virtuosos y emprendedores. La mayoría de los investigados tenían 50 años o más y acumularon su riqueza con el tiempo. A los ahorradores-inversores les tomó un promedio de 32 años hacerse millonarios. A los grandes emprendedores, 22 años. A los virtuosos, 21 años y a los emprendedores, 12.
2) Aman lo que hacen. La mayoría disfruta de su trabajo. Aquellos empresarios que canalizaron esa pasión en una idea de negocio exitosa tenían un patrimonio neto promedio de US$ 7,4 millones.
3) Siempre están aprendiendo. La mayoría expresó su objetivo de aprender, crecer y mejorar constantemente. Casi todos leen a diario para ampliar sus conocimientos sobre su trabajo y su sector. La mayoría lee al menos dos libros al mes. Esta mentalidad proviene de un valor arraigado en la educación. Los libros preferidos son biografías de gente exitosa o de historia.
4) Priorizan su salud. Muchos de los millonarios entrevistados por el autor expresaron su pasión por las actividades deportivas. La mayoría afirmó que hace ejercicio al menos 30 minutos al día, cuatro veces a la semana. Trotar, correr y andar en bicicleta son las actividades populares.
5) Invierten en sus comunidades. La filantropía es una prioridad para los millonarios del estudio. La mayoría dijo que dedicaba cinco horas o más al mes como voluntarios en organizaciones sin fines de lucro. Casi un tercio formaba parte de la junta directiva de organizaciones benéficas y entre los autodidactas había pasión por convertirse en mentores de emprendedores.
6) Son frugales. Para los millonarios, es muy importante evitar un estilo de vida descontrolado. El 64 % de los entrevistados describió las viviendas que posee como modestas. Más de la mitad compra coches usados. En cuanto al tiempo libre, casi todos afirmaron gastar menos de US$ 6.000 al año en vacaciones y el 40%, menos de US$ 3.000. Un 84% afirmó que nunca juega.

7) Les gusta planificar con antelación. Todos los participantes del estudio compartían una alta dedicación a su trabajo. El 73 % reportaron trabajar un promedio de 58 horas a la semana. Y el 44 % despertarse al menos tres horas antes de comenzar su jornada laboral. Casi todos afirmaron ser muy organizados.
8) Forman equipos fuertes. La mayoría comentó que crear una comunidad de personas positivas y con objetivos definidos fue una parte importante de su éxito. El 80% dijo que había contratado a un equipo de personas inteligentes y dedicadas en quienes confiaron para alcanzar sus visiones (esto incluye abogados, contadores, profesionales de marketing y asesores financieros).
9) Son intencionales con su dinero. Casi la mitad de quienes hicieron su fortuna por sus propios medios ahorraron el 20% o más de sus ingresos desde el primer día que empezaron a trabajar. Todos tienen algún tipo de ahorro para la jubilación. Además, la mayoría tiene más de una fuente de ingresos.
10) Aceptan el fracaso. Casi dos tercios dijo que asumió riesgos calculados al construir su patrimonio. Y casi un tercio afirmó haber fracasado al menos una vez en los negocios. Pero no dejaron que eso los disuadiera. La gran mayoría siguió trabajando y consiguió salir adelante.