Francisco Flores/Archivo El Pais.
Conferencia de prensa para hacer un anuncio en un caso, una reunión con más de 40 dirigentes de todo el país en otro, y un tercer dirigente que desde meses no esconde sus intenciones. Así están hoy los blancos: otra vez en campaña, aunque está vez se involucra menos gente porque la competencia es interna: se define su nuevo Directorio, que será votado por la convención nacional de este partido el próximo 28 de junio.
En carrera hay tres figuras de primer orden para el Partido Nacional —los senadores Luis Alberto Heber, Álvaro Delgado y Javier García—, aunque los que compiten por la presidencia del partido, en función de sus reales chances electorales, son el excandidato a presidente y el exministro de Defensa.
Este último, representante de Alianza País —el sector más grande de los blancos si se toma como referencia las últimas elecciones nacionales— ya había declarado a inicios de año que buscaría el desafío de conducir al partido en este período, con un mensaje en el que resaltó la necesidad de que la fuerza política articule con la Coalición Republicana y haga un riguroso trabajo de oposición el gobierno de Yamandú Orsi.
El anuncio de Delgado es bastante más reciente: este martes por la noche reunió en la casa de Parva Domus a legisladores, intendentes y referentes del sector Aire Fresco para anunciar, luego de escuchar a los presentes, que iría «para adelante» con el mismo desafío. En el encuentro, quienes hablaron lo hicieron en respaldo del expresidenciable. Sin embargo, hay más de un dirigente de este sector —fundado por Luis Lacalle Pou y el propio Delgado en 2008, y que en 2019 fue el espacio más grande de los nacionalistas— que tienen «dudas» sobre la conveniencia de la decisión del senador.
Distintas fuentes blancas afirmaron a El País que hay quienes temen por el «desgaste» al que puede someterse el excandidato, que arrastra todavía las consecuencias de la derrota en el último balotaje.
Y hay dirigentes que ven que Delgado no necesariamente es una opción que seduzca a la mayoría de los convencionales —los propios o los de otros sectores—, cuando estos se reúnan a fines del mes siguiente.
El sector en disputa, y los votos que se precisan
La grilla tiene, entonces, por el momento, tres nombres. El cuarto que se manejaba hasta hace algunos días era el de la exvicepresidenta Beatriz Argimón —propuesta por el gobierno de Orsi como embajadora—, quedó descartado. En una conversación telefónica que mantuvieron ambos en las últimas horas, Delgado le consultó si tenía como aspiración volver a dirigir el Directorio —como lo hizo entre 2018 y 2020— y ella le respondió que no.
Heber, por su parte, apuesta a que el Herrerismo tenga una mejor presencia en el Directorio que a la que podría aspirar si no compitiera con una lista propia, y en este sentido todos ponen el antecedente del exsenador Jorge Gandini, que con una modesta bancada parlamentaria logró en la elección de 2021 que hubiera tres directores en representación de Por la Patria.
Pero Delgado y García hace tiempo que se sabe que irán por el premio mayor —aunque el primero demoró su definición porque lo limitaban algunos motivos familiares.
En números fríos, dado que la composición de la convención nacional se define en las elecciones internas de junio, Delgado debería contar con un amplio respaldo —como precandidato, fue votado por el 75% del partido—. Pero hubo movimientos importantes entre ese mes y octubre, que quedó reflejado en la distribución interna de la bancada parlamenaria: Aire Fresco consiguió 14 diputados y tres senadores, y Alianza País —con 10 mil votos más— obtuvo nueve diputados y cuatro senadores, e incorporaciones de dirigentes como la exprecandidata Laura Raffo y el expresidente de Diputados, Sebastián Andújar, cuyos convencionales ahora están en el sector.
La distribución de fuerzas también puede medirse —como un factor más— en la cantidad de intendentes que responden a uno u otro sector, y aquí Aire Fresco tiene ventaja, porque hay al menos seis jefes comunales que en teoría responden a Delgado, y unos cuatro que lo hacen por García.
La tarea que se inicia ahora, al decir de un senador de este partido, es una «guerra» por la conquista de los convencionales rivales, y aquí es que entran en juego los sectores indefinidos.
Por ejemplo, el sector D Centro. En Aire Fresco dan casi por sentado que este espacio —de tres intendentes, un senador y cuatro diputados— responde a Delgado, por ser de alguna manera un espacio que se construyó a partir del sector fundado por Lacalle Pou.
Pero esto no es algo que ya esté definido, advirtieron dirigentes de D Centro a El País, como por ejemplo el intendente electo de Paysandú, Nicolás Olivera. «Queremos saber qué se pretende para el partido durante los próximos cinco años y si los que sinceraron sus pretensiones catalizan lo que necesita el partido», dijo el también senador electo. «Nos vamos a juntar y resolver. Porque hasta ahora solo se habla de nombres y no de lo que se pretende hacia adelante».
Serán días de intensa recorrida para los contendientes, y de charlas de varias horas con convencionales que, la mayor parte del tiempo de la vida partidaria, no tienen relevancia política.
