Creado por el Gobierno porteño durante la pandemia, el congestiómetro permite analizar en tiempo real el tráfico en toda la Ciudad, anticipar demoras, optimizar semáforos y decidir dónde desplegar agentes de tránsito o realizar obras viales.

Qué es y cómo funciona el congestiómetro de la Ciudad que anticipa por dónde conviene circular (Foto: Gobierno de la Ciudad).
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires cuenta con una herramienta innovadora para gestionar el tránsito: el congestiómetro, un sistema que analiza en tiempo real el comportamiento vehicular en toda la Ciudad y permite tomar decisiones para mejorar la circulación.
Creado durante la pandemia por el equipo de Martín Viale, Alan Balfour y Alberto Tablón, el congestiómetro nació para identificar en qué calles había mayor movimiento cuando regían restricciones de circulación. Con el tiempo, se transformó en una herramienta clave de planificación vial.
“El sistema compara la demora media de todas las calles porteñas según la hora, el día y la zona, y con esos datos se planifican obras, operativos y ajustes de tránsito”, explicó Viale, ingeniero civil y gerente operativo de Control de Tránsito y Señalización Vial.

Por su eficacia y carácter de código abierto, el modelo del congestiómetro porteño fue analizado para ser implementado en Uruguay, Chile y hasta en Trinidad y Tobago (Foto: Gobierno de la Ciudad).
Leé también: Abre el mirador del Obelisco: cuándo, precio de la entrada, horarios y cómo sacar los tickets
Antes, el monitoreo se limitaba a sensores en avenidas y calles céntricas. Hoy, el congestiómetro permite analizar el flujo vehicular en toda la Ciudad, sin importar el tamaño o la ubicación de la calle.
Los datos muestran que, tras la pandemia y con el avance del teletrabajo, ya no existen horas pico tan marcadas: la congestión se distribuye de forma más pareja a lo largo del día, con jueves como el día más cargado de la semana.

La herramienta creada por el Gobierno porteño permite comparar datos del tránsito de vehículos y tomar decisiones para mejorar los tiempos de viaje (Foto: Gobierno de la Ciudad).
Con la información que genera el congestiómetro, el Gobierno porteño define operativos, obras y ajustes semafóricos.
Entre las aplicaciones más destacadas se encuentran:
- Evaluar el impacto de obras como los Metrobuses del Bajo, Alberdi y Directorio.
- Medir los resultados del Sistema Adaptativo de Semáforos en Avenidas del Libertador y Figueroa Alcorta, que reduce los tiempos de viaje hasta un 30%.
- Planificar la ubicación de agentes de tránsito y controles de alcoholemia según los puntos de mayor congestión.
Leé también: Los cambios que habrá en los colectivos de la Ciudad de Buenos Aires a partir de 2027
El sistema también permite anticipar cómo se comportará el tránsito en las horas siguientes, lo que facilita la organización de operativos preventivos y la evaluación posterior de su efectividad.